Amnistía Internacional alertó por la libertad de expresión en Argentina
Amnistía Internacional envió una carta a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y a las Relatorías Especiales de defensores de derechos humanos.
El motivo es alertar sobre el recrudecimiento de los ataques a la libertad de expresión en Argentina. En ese sentido, consideraron que, en lo que va de la gestión del presidente Javier Milei, hubo hostigamientos a cerca de 30 periodistas.
La directora ejecutiva de Amnistía Internacional Argentina, Mariela Belski, señaló: “El actual gobierno lleva pocos meses de gestión. Sin embargo, estamos siendo testigos de cómo la confrontación, odio, temor y las noticias falsas violan reglas básicas del Estado de derecho”.
En el comunicado difundido hoy, alertaron que X (ex Twitter) “se convirtió en la herramienta preferida del gobierno para los señalamientos y acusaciones”.
“A través de posteos y reposteos, los periodistas y comunicadores han estado en la primera línea de ataque. ‘Mentirosos’, ‘ensobrados’, ‘idiotas’, ‘violentos’, ‘agresivos’, ‘despreciables’, ‘imbéciles’, son algunos de los calificativos e insultos elegidos”.
Entre los periodistas atacados, mencionan a Jorge Lanata, Jorge Fontevecchia, María O´Donnell, Marcelo Bonelli, María Laura Santillán, Martín Rodríguez Yebra, Joaquín Morales Solá y Marcelo Longobardi.
En el escrito, la organización internacional también cuestionó la arbitrariedad con la que el gobierno decidió remover la acreditación de la periodista Silvia Mercado. También, alertó sobre el anuncio del vocero de la presidencia de dictar lineamientos para la acreditación a Casa Rosada. Esto, consideraron, puede que pudieran devenir en un ejercicio arbitrario y selectivo.
Amnistía Internacional reveló además que este tipo de ataques suele tener un anclaje más profundo cuando las víctimas son mujeres. “Esto impacta directamente no solo en la reducción del debate público sino también en la salud de las personas afectadas”, agregaron.
“La libertad de expresión y de prensa son derechos fundamentales reconocidos en los tratados internacionales”. “Amnistía Internacional considera urgente que la CIDH y las Relatorías Especiales tomen conocimiento de estos graves hechos”, indicaron.
Asimismo, solicitaron que exhorten al Estado argentino a que se abstenga del uso de discursos y mensajes criminalizantes.
Los casos denunciados por Amnistía Internacional
En la carta Belski expuso dos principales áreas de preocupación: las agresiones periodistas y las restricciones en el acceso a las ruedas de prensa. Además, denunció el uso de redes sociales por parte del gobierno para “atacar y desacreditar a periodistas, generando un efecto silenciador”.
Además, detallaron ejemplos concretos de estas agresiones:
- Silvia Mercado, periodista acreditada en la Casa de Gobierno, sufrió la retirada arbitraria de su acreditación el 6 de junio de 2024. A pesar de haber cumplido con los nuevos lineamientos para el acceso, la acreditación se revocó sin explicaciones claras.
- María O’Donnell fue víctima de repetidos ataques por parte del presidente Javier Milei. El presidente retuiteó mensajes que desacreditaban a la periodista, lo que desató una ola de tuits violentos contra ella.
- El presidente trató de mentirosa a Luisa Corradini, corresponsal del diario La Nación en París. Milei utilizó su cuenta de Twitter para desacreditar a Corradini, afirmando que ella trabajaba para un medio que operaba contra el gobierno.
- El 28 de junio de 2024, el presidente retuiteó un posteo que cuestionaba a María Laura Santillán en LN+, tildándola de “pautera y operadora”.
- Sofía Diamante, periodista del diario La Nación, fue increpada por el presidente Milei tras opinar sobre los métodos oficiales para reducir la brecha financiera.
- Los periodistas Nancy Pazos y Darío Villarruel fueron denunciados penalmente por el ministro de Justicia Mariano Cuneo Libarona por supuesta “instigación a cometer delitos”. Las denuncias fueron desestimadas.
- Por último, el 18 de julio trascendió que a más de 50 periodistas acreditados se les había removido su acreditación en la Casa Rosada.