Ante respuesta de Aguas del Norte, vecinos responden “queremos agua y que sea potable”
Tras los reclamos sobre la calidad del agua en zona oeste alta que dio a conocer Nuevo Diario, la empresa Aguas del Norte respondió.
Luego de que trascendieran los polémicos resultados que arrojaron los estudios realizados por iniciativa de vecinos, y que dieron cuenta de la presencia de salmonella y escherichia colli en el agua; desde la empresa responsable de la distribución del servicio negaron la existencia de tales bacterias y pusieron en duda las condiciones del muestreo realizado por los particulares.
Nuevo Diario dialogó con Juan Bazán, Gerente de Servicios de Aguas del Norte, que en primer lugar remarcó que hasta el momento no se cursó ningún tipo de reclamo de vecinos de la zona: “nos sorprendió porque cuando alguien detecta alguna deficiencia presunta, hace las quejas por la vía que corresponde, que es el ente regulador, y esto no sucedió”, señaló. De esta manera, argumentó que: “desde el 2018 venimos haciendo una vigilancia epidemiológica que se acentuó mucho más durante la pandemia y los controles se realizan de manera conjunta con el ministerio de salud de la provincia, específicamente hacemos el seguimiento de salmonella y tenemos ausencia de salmonella en todos los sistemas de abastecimiento de agua en la provincia, con lo cual eso nos llama la atención”, insistió. “Aparte del seguimiento y vigilancia, tenemos los controles propios de calidad, periódicos en todos los sistemas de abastecimiento de agua y van al ente regulador, y es información de acceso público”, dijo e invitó a la vecina a que se acerque al ente regulador. Asimismo advirtió sobre las condiciones de muestreo que realizaron los vecinos, y aseguró que se encuentran a disposición para un nuevo muestreo.
Nuevo Diario dialogó también con Natalia Saravia, a vecina que viralizó la iniciativa, quien aseguró que el muestreo cumplió con todas las normas, aunque reservó la identidad del laboratorio al tiempo que garantizó que las muestras correspondían al sistema de agua de red, y no de un tanque, como advertían inicialmente desde Aguas del Norte.
Saravia reiteró el malestar por el servicio de la empresa: “nunca me imaginé un resultado como el que salió”, dijo y concluyó: “queremos saber qué van a hacer y cómo van a seguir, queremos agua y queremos que sea potable”.