Boris y Sofía Gurman, la valiente pareja que enfrentó a los terroristas en Bondi Beach
La tarde del domingo en Bondi Beach, uno de los lugares más icónicos de Sídney, se transformó en el escenario de un ataque terrorista dirigido contra la comunidad judía.
Entre el caos y el horror, emergieron historias de extraordinaria valentía civil. Boris y Sofía Gurman, un matrimonio ruso-judío residente en North Bondi, se erigieron como símbolo del coraje al enfrentarse directamente a los dos atacantes armados, un acto que les costó la vida pero que intentó frenar la masacre antes de que se extendiera.
La secuencia quedó registrada por una cámara instalada en el tablero de un vehículo que circulaba por Campbell Parade. La grabación mostró el momento en que el atacante principal, Sajid Akram, estacionó un Hyundai plateado junto a la pasarela que conectaba la avenida con la playa. Boris y Sofía Gurman, de 69 y 61 años, paseaban por la zona cuando advirtieron la presencia y las intenciones del agresor.
El enfrentamiento registrado
La grabación reveló la reacción inmediata de Boris Gurman al ver a Akram armado. Sin dudar, intervino y logró despojarlo de la primera arma, arrojando al atacante a la calle mientras otros buscaban cobertura. Durante unos instantes, el video mostró a Boris sosteniendo la escopeta, apuntando a Akram y tratando de impedir que continuara con su plan. Sofía Gurman se sumó a la escena, ubicándose a su lado para reforzar el intento de detener al hombre armado.
En un comunicado a Sydney Morning Herald, la familia Gurman expresó su dolor y orgullo: “Estamos desconsolados por la pérdida de Boris y Sofía Gurman. En los últimos días, tuvimos conocimiento de imágenes que muestran a Boris, con Sofía a su lado, intentando valientemente desarmar a un atacante para proteger a los demás. Esto resume quiénes eran Boris y Sofía: personas que, de forma instintiva y desinteresada, intentaban ayudar a los demás”.
Un desenlace fatal
El enfrentamiento, sin embargo, tuvo un desenlace trágico. Akram recuperó otro rifle y atacó de nuevo a la pareja, que fue ejecutada a quemarropa. Otra secuencia de la grabación mostró a los Gurman yaciendo abrazados junto al automóvil que sirvió de base para el atentado, mientras los terroristas continuaban disparando desde el puente hacia la multitud que participaba en la celebración de Janucá, la festividad judía de la Fiesta de las Luces.
Según la policía de Nueva Gales del Sur, el atentado, perpetrado por Sajid Akram y su hijo Naveed, de 24 años, provocó la muerte de un total de 15 personas, entre ellas hombres, mujeres y una niña de 10 años. Al menos 42 personas resultaron heridas. En el automóvil de los atacantes se hallaron dispositivos explosivos improvisados y una bandera del Estado Islámico.
Reacciones y otros actos de heroísmo
Las autoridades australianas calificaron el ataque de “terrorista” y “antisemita”. El primer ministro Anthony Albanese declaró que el objetivo eran los judíos australianos durante una festividad religiosa. En un mensaje televisado, Albanese manifestó su intención de endurecer la legislación sobre el control de armas tras confirmarse que uno de los autores del atentado tenía licencia para seis armas de fuego.
El heroísmo mostrado no fue exclusivo de los Gurman. Ahmed al Ahmed, identificado por medios locales como un vendedor de fruta, enfrentó a Akram a pocos metros de donde cayeron los Gurman, resultando gravemente herido pero logrando desarmar al agresor. Reuven Morrison fue otro de los vecinos que, sin armas, lanzó ladrillos a los atacantes. Morrison perdió la vida en el acto, intentando proteger a quienes escapaban del tiroteo.
La valentía de Boris y Sofía Gurman, inmortalizada en una grabación fortuita, quedó como un testimonio desgarrador del instinto humano de proteger a otros, incluso ante el peligro más extremo. Su memoria se sumó a la de todas las víctimas de una tragedia que conmocionó a Australia y al mundo.
Fuente: Infobae



