Cerco fronterizo, decisión de Nación y provincia para pelear contra el narcotráfico
La decisión conjunta y en el marco del Plan Güemes, para construir un alambrado perimetral en Aguas Blancas, está tomada.
Serán 200 metros entre la terminal de ómnibus y la oficina de Migraciones en esa ciudad fronteriza con los objetivos de reforzar los controles, la prevención de actos ilícitos y regulación migratoria.
El gobernador Gustavo Sáenz afirmó que “hay una política de los Estados nacional y provincial para pelear contra el narcotráfico y combatir el contrabando y otros delitos complejos” en una zona fronteriza crítica que, al ser un punto limítrofe con alto flujo de personas y bienes, presenta múltiples desafíos.
Por ello, aseveró: “Es la primera vez en la historia que se está trabajando seriamente y en conjunto para combatir el narcotráfico”.
Gustavo Sáenz, además, señaló que el alambrado optimizará la supervisión del flujo de personas y bienes, facilitando la identificación temprana de actividades irregulares. “Se busca encauzar la llegada y salida por la frontera; es decir que los que llegan a la terminal de Aguas Blancas sigan hasta Migraciones y saber con qué egresan y con qué llegan desde Bolivia”, dijo.
Así, consideró que las objeciones efectuadas por el Estado Plurinacional de Bolivia no son procedentes, en tanto, el alambrado se construirá en el ejido municipal de Aguas Blancas. “Sobre el tema no tenemos que dar explicaciones. Creo que llevó la cuestión más allá. Son 740 km de frontera y este alambrado son 2 cuadras y media y dentro de nuestra casa”, puntualizó.
Recordó que también Bolivia expresó objeciones cuando la provincia de Salta comenzó a cobrar el servicio de salud pública a los extranjeros. “Fue una medida de justicia y de optimización de los recursos”, aclaró.
“Con estas decisiones no sólo estamos cuidando a los salteños, sino a todos los argentinos, y es necesario seguir trabajando de manera conjunta con el gobierno nacional para lograr los objetivos propuestos”, manifestó el Gobernador.
Por último, analizó que esta infraestructura generará condiciones propicias para una migración más ordenada, sujeta a los procedimientos establecidos por los organismos competentes. A su vez, se refuerza la colaboración interinstitucional, pues las distintas fuerzas podrán unificar criterios y planificar estrategias de vigilancia conjunta.
Jaldo respalda el alambrado en la frontera de Salta con Bolivia
La decisión del Gobierno nacional de reforzar los controles en la frontera norte del país volvió a encender el debate sobre la seguridad y el contrabando en la región. En ese contexto, el gobernador tucumano, Osvaldo Jaldo, respaldó la iniciativa y sostuvo que las medidas de protección fronteriza deben ser vistas como una estrategia para combatir el ingreso de sustancias ilegales y mercadería de contrabando, sin que esto implique un conflicto con Bolivia.
Al respecto, el primer mandatario provincial explicó: “Mucho de lo que tiene que ver con el contrabando, como el ingreso de sustancias tóxicas al país, se realiza por el norte y una parte toca al hermano país de Bolivia. Además, Salta tiene fronteras muy amplias”, sostuvo y aseguró: “Creo que esta es una medida que la tienen que tomar entre los dos países, y Bolivia tiene que colaborar”.
En ese marco, Jaldo recordó que bajo su gestión se implementó el Operativo Lapacho con Gendarmería Nacional y la Policía de Tucumán para el control del ingreso de mercadería ilegal y drogas a la provincia: “Nosotros venimos secuestrando cocaína que viene desde el norte, de Bolivia, por eso tenemos que ver esto como una medida positiva para los dos gobiernos”, indicó. “Si el gobierno nacional y la provincia de Salta eligieron poner una separación para limitar los pasos en Argentina, en Aguas Blancas, es una medida que no tiene que ofender a nadie, porque lo mismo hay pasadas en las aduanas, pero con medidas de control”.