Colapinto se recuperó y terminó 14° en Las Vegas
Colapinto partió desde la calle de boxes y consiguió un avance de seis puestos en una carrera lineal, lejos de fricciones inútiles y superando incluso a algunos rivales con autos .
Franco Colapinto partió desde la calle de boxes y consiguió un avance de seis puestos en una carrera lineal, lejos de fricciones inútiles y superando incluso a algunos rivales con autos que, sobre el papel, debían ofrecer mayor rendimiento.
El argentino quedó finalmente en la 14ª posición, la misma que había logrado en la segunda fase de la clasificación del viernes antes de su tremendo accidente en la curva 16 del circuito de 6,2 kilómetros.
En las horas previas al Gran Premio, se reveló que la noche del viernes fue quizás la más difícil en la vida de Franco. Los médicos de la Federación Internacional del Automóvil le diagnosticaron una leve conmoción y le recomendaron descanso hasta el sábado a las 14, horario que le reservaban para una segunda revisión y darle el alta, si correspondía.
El impacto contra el muro en la salida de la curva 16, alcanzó una intensidad de 50G. Su casco golpeó contra el halo de protección, estirando las vértebras del cuello en la desaceleración. Afortunadamente, el casco resistió el impacto, y Franco no sufrió lesiones visibles.
En el paddock de Las Vegas, los mecánicos de Williams, apoyados por el equipo de su compañero Alex Albon, desmontaron los restos retorcidos del chasis de Colapinto, cambiando prácticamente todo: chasis, carrocería, alerones, suspensiones, frenos y más. Era armar, casi, un coche nuevo.
Su compañero Alex Albon largó bien en la carrera y comenzó a avanzar, pero en la vuelta 26 tuvo que abandonar por un fallo en el motor. Entonces fue Franco quien pasó a defender los colores de Williams.
Sobre los mecánicos que repararon su auto, Colapinto dijo: “Les tengo que hacer una estatua. Es una cosa de locos. Quería darles a los mecánicos algo para festejar hoy a la noche, pero bueno; lo haremos en Qatar”.