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Con “Caminos de sabiduría”, becarias homenajean a los abuelos del paraje El Toro

La Fundación Alfarcito, en el marco de los proyectos que llevan adelante sus jóvenes becarias en sus comunidades, compartió una jornada especial con los abuelos del paraje Finca El Toro, con una actividad llamada “Caminos de sabiduría con nuestros abuelos”.

La iniciativa, organizada por las becarias Miriam Arjona, Paola Bibiana Flores, Gabriela Arjona, Milagros Luzco, Maura Bautista y Leoncia Lamas, buscó honrar y acompañar a los mayores, reconociendo su importancia en la comunidad y creando un espacio de alegría, participación y gratitud.

“Queremos promover el bienestar emocional, social y físico de los abuelos a través de diversas actividades. Nuestro objetivo es fomentar la participación activa y el intercambio cultural entre generaciones”, expresaron las organizadoras.

Durante la jornada, los abuelos participaron en diferentes juegos y dinámicas que permitieron romper el hielo y crear un clima de confianza.

Entre las actividades destacadas estuvo la ronda con el ovillo de lana, donde cada abuelo se presentó y compartió sus gustos, logrando momentos de emoción al escuchar sus historias y anécdotas.

Otro de los juegos más divertidos fue “Colocar la cola a la vaca”, donde, con los ojos vendados y guiados por sus nietas, los abuelos intentaron completar el dibujo. La actividad estuvo llena de risas y complicidad, fortaleciendo los lazos familiares y generacionales.

Además, los participantes compartieron un almuerzo donde los abuelos fueron los invitados de honor, generando un espacio de reconocimiento y cariño.

Homenaje al Padre Chifri

La jornada tuvo también un momento de profunda espiritualidad y reflexión. En la capilla del paraje, se realizó una meditación en memoria del querido Sigfrido Maximiliano Moroder, o Padre Chifri, al cumplirse 13 años de su partida. La emoción invadió a todos los presentes, recordando el legado de amor y compromiso del Padre con las comunidades de la región.

Al finalizar, se acompañó a los abuelos que viven en lugares más alejados hasta sus hogares, cuidando que pudieran regresar antes de que bajara la temperatura.

Las jóvenes becarias destacaron la importancia de estas acciones para el bienestar de los mayores.

Con esta jornada, no solo se generaron momentos de alegría y convivencia, sino también un profundo aprendizaje, reafirmando la sabiduría y los valores que los abuelos transmiten a las nuevas generaciones.

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