Condena de 18 años de prisión efectiva por el crimen del tarotista
Juan Manuel Peinado fue condenado a 18 años de prisión efectiva por el homicidio de un hombre de 52 años, reconocido en la ciudad por su actividad como tarotista.
El hecho ocurrió el 7 de agosto de 2023 en un domicilio de Villa Saavedra, en Tartagal, donde la víctima fue gravemente herida con un arma blanca durante una disputa con el acusado. Según la declaración del joven, desconocía la identidad de la víctima y, al creer que iba a ser abusado sexualmente, utilizó un cuchillo que tenía a mano y lo apuñaló varias veces.
Consumado el homicidio, Peinado huyó del lugar y, horas después, se presentó voluntariamente en la comisaría, donde relató lo sucedido y confesó su autoría. La autopsia determinó que la causa de muerte fue un shock hipovolémico provocado por las múltiples lesiones cortantes. La audiencia de juicio abreviado fue presidida por la jueza Azucena Vásquez, quien, tras la confesión del imputado y la solicitud de la defensa, aprobó el proceso y dictó la sentencia.
El fiscal penal de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas de Tartagal, Gonzalo Ariel Vega, representó al Ministerio Público Fiscal, y fue quien presentó la acusación correspondiente.
Reparar el daño
En una audiencia flexible y multipropósito, la fiscalía relató un hecho de violencia, pero las partes llegaron a un acuerdo y se suspendió el juicio.
El acusado, un hombre de 29 años imputado en una causa por violencia contra su expareja, deberá realizar trabajos comunitarios y pagar una compensación económica.
El juez de la Sala II del Tribunal de Juicio de Metán, Sebastián Fucho, hizo lugar al acuerdo. Como condiciones para mantener el beneficio, se ordenó al imputado reparar el daño causado a la víctima con una compensación de cincuenta mil pesos y realizar trabajos comunitarios de albañilería no remunerados en un hogar de ancianos de la ciudad.
La denuncia fue presentada por su expareja, con quien mantuvo una relación de 12 años y tiene dos hijos en común. Según la mujer, llevaban un año y medio separados sin conflictos previos, y hasta el momento del ataque mantenían una buena relación. Expresó que desconoce los motivos de la agresión, ya que no considera al acusado una persona violenta ni consumidora de alcohol o sustancias.
El día del hecho, el hombre se presentó en su domicilio, la golpeó y se llevó a su hijo, junto con ropa y documentación.