Destacan que las claves para prevenir el suicidio son el diálogo, sensibilización y responsabilidad
Cada 10 de septiembre se conmemora el Día Nacional y Mundial para la Prevención del Suicidio. La fecha fue impulsada por la Asociación Internacional para la Prevención del Suicidio y la Organización Mundial de la Salud.
Si bien los registros y tasas de la provincia superan los de la media nacional, desde Salud de la provincia aseguran que los dispositivos de abordaje se encuentran en pleno funcionamiento.
El suicidio se encuentra entre las 20 principales causas de muerte para personas de todas las edades y es considerado como uno de los mayores problemas de salud pública a nivel mundial. Se estima que, por cada suicidio, más de 100 personas se ven afectadas, incluyendo a la familia, amistades y personas relacionadas por trabajo, estudio u otras actividades compartidas. En el caso de Salta los registros de los últimos años según un informe de UNICEF de mayo de este año (publicado desde el Ministerio de Salud de la provincia) indican una tasa de 12,76 suicidios cada 100 mil habitantes, del 2021, y en el 2020, fue de 14,32. Así, la provincia supera ampliamente la media nacional de suicidios, que es de 7,8.
Posibles causas
El suicidio es el resultado de una convergencia de factores de riesgo: genéticos, psicológicos, sociales, culturales y otros. En algunos casos, estos factores se combinan con experiencias de trauma y pérdida. El comportamiento suicida, a menudo, se relaciona directamente con problemas de violencia sexual o doméstica, consumo de sustancias, problemas familiares o de convivencia y violencia social.
Sensibilización, abordaje y comunicación
En el marco de las actividades por esta fecha, Nuevo Diario participó del conversatorio y webinario "Hablemos de suicidio", organizado por la Red Federal Argentina Comunitaria de Prevención contra el suicidio, con referentes en la temática de todo el país. Los ejes se centraron en la visibilización, sensibilización y comunicación responsable.
Desde este espacio se advirtió sobre la escasez de recursos humanos para el abordaje de la problemática, y la necesidad de una comunicación eficaz, al tiempo que contenedores: "es una bomba expansiva sobre la que hay que intervenir, y que incluye a niños, niñas, adolescentes, trabajadores de la salud y hasta periodistas, totalmente saturados que piden ayuda y necesitan ser escuchados", indicaron y refirieron también a la falta de estadísticas actualizadas y propias desde el sector de la salud a nivel nacional
Asimismo, se hizo hincapié en la necesidad de contar con un protocolo de evaluación de riesgo de las personas suicidas que funcione en las distintas áreas y dependencias de salud, educación, comunales, y que pueda ser utilizado por profesionales exclusivamente formados para este abordaje. Cabe destacar que para nuestra provincia, existe y funciona el protocolo de abordaje a través del programa GUIAF, aprobado por resolución ministerial como Grupo Interdisciplinario de Abordaje Familiar en Episodios de Suicidio o Intento de Suicidio (el mismo funciona en Sarmiento 655).
Ni tabú ni silencios: comunicar con responsabilidad
Los exponentes en el conversatorio insistieron en que el desafío frente a esta problemática reside en acciones concretas desde los medios de comunicación, en términos de sensibilización y mensajes que combatan mitos, eliminen creencias equivocadas y brinden información de servicios, atención de la comunidad y profesionales expertos. Asimismo, resulta trascendental el tratamiento de estas noticias, siendo conscientes que no se trata de "noticias policiales", sino de salud: "es necesario abordar el tema desde un lugar humanizado".
Por último, desde el webinario federal recalcaron la necesidad de avanzar en la problematización de los mensajes estigmatizantes y de odio que transmiten los medios y también las redes sociales, con estándares impuestos por una sociedad de mercado y de descarte que conducen a una vida solitaria y carente de espacios y tiempos reales.