El Materno Infantil negó prácticas de exorcismo en sus instalaciones
El Hospital Público Materno Infantil (HPMI) de Salta se encuentra en el centro de la atención pública tras la difusión de noticias que lo vinculan con la supuesta realización de un exorcismo a una niña de nueve años en sus instalaciones.
Mediante un comunicado oficial, las autoridades del hospital desmintieron categóricamente estas versiones y ofrecieron una aclaración sobre los hechos.
Según el comunicado emitido por el HPMI, el 6 de diciembre ingresó una menor que presentaba cefalea intensa. Tras una evaluación exhaustiva, se diagnosticó meningitis viral, lo que llevó a la realización de diversos estudios complementarios, como un electroencefalograma y análisis de laboratorio. Los resultados confirmaron el diagnóstico, y la paciente recibió atención especializada en pediatría, neurología y salud mental, además de los cuidados necesarios de acuerdo con los protocolos médicos establecidos.
Asimismo, las autoridades enfatizaron que “en ningún momento se realizaron prácticas de exorcismo” en el hospital. Según explicaron, la familia solicitó asistencia religiosa, la cual se brindó dentro de un marco de respeto a sus creencias y en alineación con los principios éticos y científicos que rigen la institución. La evolución clínica de la menor fue favorable, respondiendo adecuadamente al tratamiento indicado.
El contexto religioso y la figura del exorcista a través de un Ministerio
Esta situación reaviva el debate sobre la interacción entre la religión y la medicina en casos delicados de salud. Cabe destacar que, en noviembre de 2022, la Iglesia Católica de Salta creó el Ministerio del Exorcista, una institución destinada a abordar casos relacionados con supuestas posesiones demoníacas. En declaraciones a Infobae, sacerdotes salteños defendieron la importancia de contar con un exorcista oficial, argumentando que el demonio puede manifestarse a través de la posesión y que es necesario responder a estos fenómenos desde la perspectiva de la fe.
Por otro lado, informaciones recientes publicadas por medios locales revelan que el sacerdote que habría estado involucrado en la asistencia religiosa solicitada por la familia de la niña sería el padre Loyola Pinto y de Sancristóval, vicario judicial del Arzobispado de Salta, oficializado también exorcista. Este hecho generó controversias y especulaciones, a pesar de las desmentidas emitidas por el nosocomio local.
Debate caliente
La noticia ha generado reacciones divididas en la comunidad salteña. Mientras algunos critican la aparente mezcla de creencias religiosas con el ámbito hospitalario, otros defienden el derecho de las familias a recibir asistencia espiritual acorde a sus convicciones. Desde el Hospital Materno Infantil reafirmaron su compromiso con la salud y el bienestar de todos sus pacientes, asegurando que su prioridad es ofrecer una atención sanitaria basada en evidencia científica y respeto a la dignidad humana. Además, subrayaron que cualquier asistencia religiosa brindada en sus instalaciones se realiza bajo estrictos protocolos.
El debate está lejos de concluir y plantea interrogantes sobre los límites de la espiritualidad en instituciones públicas dedicadas a la salud.