Gabriel Boric: “Sepan que vamos a dar lo mejor de nosotros”
El ex líder estudiantil Gabriel Boric asumió en Valparaíso como presidente de Chile en una ceremonia colmada de símbolos, en cuanto a el feminismo, pueblos originarios y contra la dictadura, en la que se destaca una mayoría de mujeres en su nuevo gabinete.
En la ceremonia de asunción hubo algunas rupturas de protocolo, que sentaron el primer sello de un Gobierno que busca cambios estructurales en un país marcado por la crisis social.
"Ante el pueblo y los pueblos de Chile, sí prometo", dijo Boric, de 36 años, quien acto seguido levantó el puño izquierdo y firmó, tras respirar profundamente, su cargo como máxima autoridad del país.
Ante un plenario que lo ovacionaba de pie, el flamante jefe de Estado -visiblemente emocionado- recibió con una sonrisa la banda presidencial y la mítica piocha de O'Higgins -símbolos del traspaso de poder- de manos del presidente del Senado, el socialista Álvaro Elizalde, y del mandatario saliente, el conservador Sebastián Piñera, respectivamente.
Poco después, se hizo la investidura de la primera ministra de Interior del país, Izkia Siches, y a continuación, la del resto de ministros del gabinete, en el que hay 14 mujeres y 10 hombres.
Antes de tomarles juramento, Boric rompió el protocolo y les dirigió unas palabras.
"Estoy profundamente orgulloso de este gabinete", de que "sean más mujeres que hombres", expresó.
Entre los invitados a la ceremonia, que tuvo lugar en el Salón de Honor del Congreso ubicado en la costera Valparaíso, había jefes de Estado y de Gobierno, pero también representantes de todos los pueblos originarios del país, así como figuras de la cultura y el feminismo latinoamericanos y familiares de desaparecidos de la dictadura militar de Augusto Pinochet (1973-1990).
Muchos portaban pañuelos o vestimenta verdes -a favor del aborto legal- o violetas -contra la violencia de género-, mientras que escaseaban las corbatas -el propio Boric no se puso una- y había también pancartas con el lema "Nunca más".
Al concluir el acto, el flamante mandatario volvió a romper el protocolo y se acercó a hablar con la prensa, un gesto inédito en la historia de la democracia chilena.
Aún con emoción en su voz, Boric expresó un "gran sentido de la responsabilidad y el deber ante el pueblo de Chile".
"Sepan que vamos a dar lo mejor de nosotros para estar a la altura de los desafíos que tenemos como país", sentenció.
Boric volvió a la residencia presidencial de verano en Cerro Castillo, situada frente al Pacífico en Viña del Mar, donde la diplomática oriunda de Isla de Pascua, Manahi Pakarati, vestida con vestimentas típicas del pueblo rapa nui, recibió como directora de Protocolo a cada invitado a un almuerzo con el flamante mandatario: los presidentes de Uruguay, Luis Lacalle PouAlberto Fernández Pedro CastilloFelipe VI de España; Luis Arce, de Bolivia; y la ex presidenta brasileña Dilma Rousseff.
"Boric es un chileno que piensa en América Latina y eso nos pone contentos", manifestó el presidente argentino, quien dijo tener la mejor opinión del flamante jefe de Estado del país vecino y que fue orador junto a Boric en el almuerzo en Cerro Castillo.
Antes de la ceremonia de asunción, Giorgio Jackson, el nuevo secretario general de la Presidencia de Chile y ex compañero de Boric, al frente de las protestas estudiantiles junto a Camila Vallejo, la nueva vocera, consideró que se trataba de "un momento muy importante para la historia" del país.