Gobernadores formaron un frente contra los vetos de Milei

Los gobernadores Martín Llaryora (Córdoba), Carlos Sadir (Jujuy), Maximiliano Pullaro (Santa Fe) e Ignacio Torres (Chubut) se reunieron para reclamar la sanción de los proyectos de coparticipación automática de los ATN y de biocombustibles, que fueron aprobados por el Senado el 11 de julio último, en lo que fue una señal de autonomía respecto del perfil dialoguista que venían manteniendo con el gobierno de Javier Milei.
Los mandatarios, que pertenecen a distintos espacios, se dieron cita a las 17 en la Casa de Chubut, en un encuentro que fue organizado con hermetismo y sobre el que se mantuvo el misterio durante toda la jornada.
También analizaron la estrategia legislativa del sector ante los eventuales vetos de Milei a los proyectos de aumento de jubilaciones, extensión de la moratoria previsional y de emergencia en Discapacidad, que cuentan con la sanción del Congreso.
Mientras Sadir y Pullaro pertenecen al radicalismo, Torres es exponente del PRO y Llaryora del peronismo cordobés, que está separado del kirchnerismo; juntos habían operado hasta hacía poco como aliados de la Casa Rosada.
Tras la reunión, Torres señaló que el bloque de gobernadores no está “pidiendo plata a la Nación” y sostuvo que “cuando el Gobierno habló de eliminar los curros de los fideicomisos, es exactamente lo mismo que planteamos nosotros”.
El mandatario chubutense especificó que existen “otras asignaciones específicas que se coparticipan y no hacen al equilibrio fiscal, como la asignación específica del impuesto al combustible, que dice por ley que no puede usarse para otra cosa que no sea para mantenimiento de rutas, y esa partida no se está ejecutando”.
Torres planteó así que “podemos hacer muchas obras con ese dinero” a través de la “disolución” de esa asignación específica para “distribuirla bajo los índices de coparticipación”.
Por otro lado, señaló que los ATN “siempre se usaron como látigo y chequera para premiar a los gobernadores amigos y castigar a los opositores”, aunque representa “el 1% de la masa coparticipable federal” y “el Gobierno no lo puede contemplar como equilibrio fiscal”.
“Pedimos que se elimine el látigo y chequera y se distribuya de manera justa entre todas las provincias”, insistió el mandatario patagónico.
Además, negó que haya “cambio de figuritas” en la negociación legislativa con el Gobierno y sostuvo que “dar una discusión previsional sin contemplar además una cuestión laboral es pan para hoy y hambre para mañana.”