En el marco de la investigación por la desaparición de Rosmary Aramayo Torres, y ante la presunción de que la mujer podría encontrarse sin vida, el fiscal penal de Salvador Mazza en feria, Jorge Armando Cazón, derivó la causa a la Unidad de Graves Atentados contra las Personas (UGAP), a la cual caratuló como femicidio.
Tras la última declaración de José Miranda, su pareja, se determinó la búsqueda en aguas de Pozo de Yegua.
Cambio de carátula
El cambio de unidad investigativa se dispuso tras la declaración ampliada del imputado, realizada el lunes por la tardenoche a pedido expreso del mismo y en presencia de su abogado defensor.
El hombre relató que el pasado 17 de enero, mientras estaba junto a su pareja en las inmediaciones del río, en un lugar conocido como Pozo La Yegua, se habría producido un desborde de la tierra y la mujer habría caído al agua.
El imputado manifestó que no pudo ingresar al río porque no sabía nadar y que, habría permanecido en la orilla esperando que su pareja saliera, pero esto no ocurrió.
Aseguró sentirse en estado de shock y dispuesto a colaborar para identificar el lugar exacto de los hechos.
Con base en esta declaración, y considerando que la causa excede su competencia, el fiscal Cazón resolvió remitir el caso a la Unidad de Graves Atentados contra las Personas (UGAP) para corroborar la versión del imputado y profundizar en la investigación a través de las diligencias pertinentes.
En un inicio, la pareja de la mujer sostuvo que ella había decidido no regresar de Bolivia por voluntad propia. No obstante, surgieron contradicciones entre su relato y las pruebas obtenidas por la Fiscalía durante la investigación, lo que llevó a su detención e imputación.
Rastrillajes
La búsqueda de la mujer se concentró en las aguas del río cercano a Pozo La Yegua, donde su pareja señaló que ella se había caído.
Bomberos, policía, lacustre del Bermejo, y división canes, además de familiares y amigos colaboran en su rastrillaje.
Como se sabe en la noche del lunes marcharon por las calles de Salvador Mazza pidiendo justicia y la pronta investigación.
Los manifestantes llegaron hasta las puertas de Gendarmería y de la comisaria del lugar reclamando por la causa que hoy ya está caratulada como femicidio.
Los rastrillajes se realizan con ganchos y distintos elementos tratando de hallar el cuerpo de la mujer desaparecida el 17 de enero pasado.
José Miranda dio distintas versiones sobre esa mañana de domingo.
Hoy, tristemente ya buscan el cuerpo, su madre y hermano llegaron desde Tarija para conocer la causa, Alejandra Torres, su madre, señaló que ella está segura que José Miranda es el culpable, “no me miró a los ojos, y cuando le pedí que me diga dónde está, no me contestó nada”, dijo la mujer.
“Toda la descripción es violenta”
Isabel Soria, referente de la Fundación Volviendo a Casa, señaló que desde el primer momento se esperó lo peor tras conocerse las declaraciones de su pareja José Miranda, que fueron cuatro.
“Primero hace una denuncia por ubicación de paradero, después dice que la vio subir a un auto blanco, que lo abandonaba, que se quería separar, después en la policía frente al hijo, dice que la mató, después se desmiente, y dice que se cayó en el río. O sea, es muy violenta toda la situación y descripción”, sostiene la presidenta de la fundación.
Destaca que cuando José Miranda es detenido, estaba durmiendo la siesta, “es muy raro que, si alguien delante de uno se cae al río, uno se vaya a dormir la siesta, sin ir a buscar ayuda”, remarcó Soria.
Luego señaló “estamos ante un enero muy triste con este primer femicidio en Salta”.
Finalmente dijo estar en contacto permanente con Alejandra Torres, la mamá de Rosmery, que llego de Tarija, Bolivia, junto al hermano de Rosmery y su esposa.
Destacó que llegaron para conocer cómo está la causa y el rumbo de las investigaciones, que por ahora se centran en los rastrillajes en Pozo La Yegua.
Donde además existirían pruebas fílmicas que lo ven ingresar con Rosmery en la camioneta roja, y a las horas salir solo.
La Fundación Volviendo a Casa. Prov. de Salta se rige por el resguardo de derechos humanos, además de combatir la trata y tráfico de personas.
Su titular Isabel Soria, sostuvo que tristemente Salta inicia el año con este primer femicidio donde toda la descripción del hecho, que realizó la pareja de Rosmery Aramayo Torres está llena de violencia, tratando de desviar continuamente la investigación.