Transcurrido el día de reconocimientos y honores al General Juan Domingo Perón, impulsor de un modelo de país y una doctrina que transformó la historia de los argentinos y argentinas, sobrevuelan esquirlas de las autocríticas de este movimiento político, a propósito de un presente convulsionado que trae como elemento reciente, la aprobación de una reforma profunda del Estado que va en contramano con las políticas promulgadas hasta aquí por el peronismo.
En este último sentido, sin dudas los legisladores provinciales jugaron un rol importante y controversial sobre el fino límite entre el “dialoguismo”, “la extorsión” y “la gobernabilidad”.
En una reciente entrevista con Nuevo Diario, Walter Wayar, senador provincial y ex vicegobernador salteño, compartió su visión crítica sobre la situación política actual en Salta. El legislador abordó varios temas, desde el respaldo de los legisladores nacionales salteños a la Ley Bases y Puntos de Partida del presidente Milei, hasta el carácter del Pacto de Güemes y la configuración del “saencismo” o “salteñismo”.
Sus declaraciones sin dudas reflejan una profunda insatisfacción con el curso que ha tomado la representación política en su provincia.
Wayar fue tajante al criticar el apoyo de los legisladores salteños a la legislación promovida por Milei, considerándolo una traición a los votantes peronistas. “La democracia es representativa”, afirmó. “El votante peronista te vota para que representes un ideario de proyecto de país, de vida… Si vos luego te borocotizas… estás dejando sin representación y sin voto a tus electores y eso es una deslealtad muy grande”.
La deslealtad de los legisladores, según Wayar, reside en el cambio de postura una vez elegidos. Criticó el argumento de ser “dialoguistas” como un pretexto para justificar un cambio de lealtad política. “Yo no digo que no dialoguen pero que lo hagan fijando su posición no cambiándola”, expresó con firmeza.
El senador también cuestionó la legitimidad de las acciones del presidente Milei y las motivaciones detrás del apoyo legislativo a su ley. “Hay un presidente que a los gobernadores los recontra maltrató y sin embargo luego los convocó e hizo que acompañaran este proyecto de ley… Milei les dijo a los legisladores nacionales viejos meados, coimeros, lacras… pero después nos enteramos que hubo nombramientos, ofrecimientos de embajadas, nombramientos para otros senadores… el presidente al final utilizó coimas para lograr la ley”, denunció Wayar, trazando un paralelismo con la Ley Banelco de la era De la Rúa.
La crítica de Wayar no se detiene en los legisladores y el presidente, sino que se extiende al propio partido justicialista. Señaló una desconexión entre las bases peronistas y sus representantes. “El partido justicialista sacó un comunicado fijando una posición firme con bastante sentido peronista, pero luego sus legisladores hicieron otra cosa. Luego no vi un comunicado del partido diciendo que no estaban de acuerdo con los legisladores. Cuando te ponés en esos grises, cuando te quedás en la tibieza no es bueno para el desarrollo y ahí es donde aparecen las contradicciones”.
“No fue un pacto, fue un recordatorio”
Sobre el denominado Pacto de Güemes, Wayar fue igualmente crítico. Comparó la firmeza del caudillo salteño en rechazar un pacto con los realistas incluso en su lecho de muerte, con la falta de claridad y compromiso de los actuales políticos salteños. “Aquí le firmamos un recordatorio… después se lo entregamos personalmente a Milei, le regalamos un poncho… ¿qué pacto? Un pacto es un acuerdo de partes y podríamos haber hablado sobre los serios problemas que tiene la provincia y la región”, argumentó.
Finalmente, al abordar el rol del gobernador Sáenz y la cuestión del voto electrónico, Wayar expresó su desconfianza en el sistema actual. “Mientras lo haga, siempre dije que, con este instrumento, el sector poderoso de Salta va a poder decidir siempre quienes van a ser sus futuras autoridades. Me parece que es lo peor, pero nadie hizo nada”, sentenció.
Algo más que “panperonismo”
Wayar además realizó un profundo análisis del movimiento peronista a nivel nacional en la era Milei, al tiempo que dialogó con los puntos de vista expresados en Nuevo Diario por el diputado provincial mandato cumplido Manuel Santiago Godoy, y Pablo Kosiner a propósito de la idea de los pasos que debe seguir el espacio político para lograr una reactivación.
En ese sentido, y como respuesta al concepto de “panperonismo” utilizado por Godoy para aspirar a una confluencia de todas las vertientes peronistas, Wayar aseveró que “es necesario ir más allá”, y se posicionó más cerca de la mirada de Pablo Kosiner, a la hora de pensar un frente más amplio y en el que converjan además otros espacios políticos para poder hacer frente a una propuesta de país como la de Javier Milei, en donde según sostuvo el ex vicegobernador: “el enemigo es el Estado y el Pueblo Argentino”. No obstante, Wayar remarcó en todo momento la necesidad de discutir y resolver las tensiones internas como el principal de los desafíos que enfrenta el peronismo.
La Desarticulación del Partido Justicialista
Wayar no dudó en calificar al Partido Justicialista como “bastante desarticulado” a nivel nacional. Según él, uno de los errores fundamentales fue la elección de Alberto Fernández como presidente del PJ. “El desgaste que se generó como presidente de la Argentina lo llevó al partido y el partido quedó como con los brazos bajos por ahora”, afirmó. Esta desarticulación no solo se observa en el ámbito nacional, sino también en las provincias, incluida Salta, donde Wayar destaca que el PJ ha perdido su identidad y sentido de pertenencia desde hace años.
A pesar de la desarticulación del PJ, el legislador salteño reconoce que el movimiento peronista sigue en marcha a través de sus distintos sectores y agrupaciones. En este contexto, destaca el trabajo de Guillermo Moreno, a quien Wayar apoya y para quien está conformando el Partido Principio y Valores en Salta. “El peronismo a través de sus distintos sectores y agrupaciones está moviendo, está caminando el país”, señaló, mencionando también a figuras como Axel Kicillof y Juan Grabois, quienes están trabajando en sus respectivas áreas.
La estrategia de la confederación de Partidos Peronistas
En cuanto a la estrategia para el futuro, Wayar propone la creación de una confederación de partidos peronistas, una idea que considera esencial para construir un frente amplio capaz de enfrentar a Milei en las próximas elecciones. “Debe haber una federación de partidos peronistas… porque del peronismo han salido un montón de partidos”, explicó. Una vez lograda esta confederación, Wayar aboga por ampliar el frente con otros partidos del campo popular, siguiendo una estrategia similar a la planteada por Pablo Kosiner.
La amenaza de Milei
El senador Walter Wayar consideró en diálogo con este medio, que el presidente Javier Milei ha elegido al Estado como enemigo, y por ende, a todos los argentinos. “Ha elegido como enemigo al Estado y al elegir como enemigo al Estado, ha elegido como enemigo a los argentinos”, sostuvo. Este enfoque, según el referente peronista salteño, ha sido aprovechado por un sector de la población que siente odio hacia el peronismo y que apoya a Milei con la esperanza de destruir el movimiento. En ese sentido, profundizó sobre la grieta que hoy divide a los argentinos y que se expresa en un marcado antiperonismo, que además impide visibilizar los alcances en materia de construcción de derechos.
Autocrítica y Autenticidad en el Peronismo
Un punto crucial en el análisis de Wayar es la necesidad de autocrítica dentro del peronismo. Critica a aquellos que hablan de autocrítica, pero se centran en los errores de otros sin reconocer los propios. “La autocrítica significa que cada uno… debe hacer su autocrítica”, enfatizó. Además, destaca la importancia de la autenticidad, citando el ejemplo de Guillermo Moreno, quien ha logrado atraer a numerosos jóvenes gracias a su estilo directo y sincero.
¿Y Cristina?
En cuanto a Cristina Kirchner, si bien Wayar reconoció su importancia dentro del peronismo también insistió en que no debe ser la única voz decisiva.
“Decir que Cristina no es importante dentro de la construcción de ese frente que se va a plantear, es desconocer la política”, afirmó. Sin embargo, el legislador salteño se mostró enfático contra la idea de que ella dicte unilateralmente las acciones del movimiento, abogando por un enfoque más democrático y consensuado. que incluya abiertas participativas y democráticas, y, sobre todo, renunciar al capítulo de la elección de candidatos “a dedo”.