Inspección en el Vertedero: La jueza requirió evaluación ambiental del CONICET
En la mañana de ayer, se llevó adelante la inspección ocular ordenada por la jueza Victoria Mosmann al Vertedero San Javier, en el marco de la causa por contaminación ambiental iniciada hace 6 años por el Partido Obrero.
En diálogo con Nuevo Diario, la referenta del PO Gabriela Cerrano recordó que la inspección ocular realiza ayer fue ordenada por la jueza Victoria Mosmann, quien está hoy a cargo de la causa iniciada seis años atrás con un amparo presentado por el partido junto a los vecinos de barrio Solidaridad por la contaminación y las condiciones de salud de los vecinos. “De acuerdo a los informes del Hospital Papa Francisco y del Centro de Salud, se identifican tres enfermedades importantes de parasitosis, de la piel y respiratorias”, indicó.
Uno de los puntos del amparo es la situación de la Trinchera 1, que de acuerdo a lo que se les informó ayer, tiene 36 metros de altura y representa un peligro. La trinchera 4 está ya disponible para usar, con la correspondiente geomembrana, situación con la que insistió el actual ministro de Seguridad y Justicia Marcelo Domínguez, quien antes de asumir el cargo estaba al frente de la causa. La respuesta de Agrotécnica Fueguina sostuvo que no pueden empezar a utilizar la nueva trinchera por cuestiones de “seguridad” relacionadas a la gente que ingresa al Vertedero San Javier.
La jueza señaló que para avanzar en una resolución necesita un estudio ambiental que presente las pruebas de contaminación. La Municipalidad presentó a una empresa para que realice los estudios, pero al ser ya contratista del ejecutivo, la jueza rechazó la propuesta y solicitó que dicho estudio sea realizado por el CONICET, buscando la imparcialidad del mismo.
“Vamos a ver cómo avanza. Ellos siguen manifestando que una vez que pare la etapa de lluvia podrían empezar a usar la Trinchera 4, porque hoy acumula agua. También vimos en esta inspección la presencia de menores de edad, o sea, que no tienen un control a pesar de tener un guardia de seguridad privada”, dijo.
En el mismo sentido, Cerrano informó que observó con suma preocupación las familias que viven a muy corta distancia del Vertedero, en una situación de pobreza extrema “en la cual la Municipalidad se lava las manos”. Incluso, no está realizada la barrera de árboles en el perímetro, algo que está explicitado en el contrato, con la justificación de que las especies de árboles que intentaron usar “no funcionaron” y que ahora intentan usar árboles nativos, que son de baja altura. Mientras, a los vecinos de los barrios de Solidaridad y Justicia le llegan con el viento las bolsas de plástico y los olores nauseabundos.
“La situación es insostenible. No puede haber un Vertedero de esa envergadura con gente viviendo tan cerca. A Solidaridad y a Justicia los hizo el gobierno, no nacieron de asentamientos y a los que hay es porque no se da una respuesta a la gente que no tiene donde vivir”, expresó.
Como conclusión, consideró que debe pensarse en la relocalización o cierre del Vertedero San Javier ante la preocupante situación a la que están expuestos los vecinos de la Ciudad.