Jóvenes del Valle de Lerma brillaron en el Concurso de Proyectos Técnicos
La creatividad y la innovación volvieron a ser protagonistas en el Valle de Lerma con la realización de la tercera edición del programa provincial destinado a potenciar las oportunidades de los estudiantes de escuelas técnicas.
La iniciativa, impulsada por la Secretaría de Coordinación Interministerial junto al Ministerio de Educación, reunió a equipos de distintas localidades que presentaron propuestas vinculadas a economía circular, energías renovables, inteligencia artificial y producción alimentaria.
En esta edición, el premio mayor fue para la Escuela de Educación Técnica N.º 3.161 de Chicoana, que desarrolló un sistema de pilares premoldeados para la bajada de luz eléctrica.
El proyecto ofrece una alternativa económica y segura para la instalación domiciliaria, capaz de soportar la tensión requerida y cumpliendo con las normas de las empresas distribuidoras.
La ceremonia de premiación tuvo lugar en la E.E.T. N.º 3.112 de Cerrillos y contó con la presencia de la ministra de Educación, Cristina Fiore Viñuales; la secretaria de Coordinación Interministerial, Gabriela Carolina Masmut; intendentes del Valle de Lerma, legisladores, docentes y familias que acompañaron a los equipos.
Además del proyecto ganador, se distinguieron múltiples propuestas que reflejan el potencial de la formación técnica en la provincia.
En El Carril, la E.E.T. N.º 3.116 presentó un plan de producción anual de gírgolas como alternativa sustentable, nutritiva y de bajo impacto ambiental. En Campo Quijano, alumnos de la E.E.T. N.º 3.106 desarrollaron “Aerologic”, un sistema de ventilación inteligente para mejorar la calidad del aire en espacios cerrados, junto a otros prototipos como una clasificadora automatizada de hojas de tabaco —actualmente en fase de mejora— y una hornalla portátil que funciona con aceites usados y energía solar, pensada para sustituir el gas envasado y la red eléctrica.
En Cerrillos, la escuela anfitriona presentó un proyecto de elaboración de gomitas saludables a partir de insumos renovables y biodegradables, combinando innovación alimentaria y sustentabilidad.
Por su parte, en Animaná, la E.E.T. N.º 3.155 trabajó en el aprovechamiento del orujo de uva seca —subproducto de la elaboración del vino— para impulsar microemprendimientos locales, además de investigaciones avícolas y mejoras en la producción de huevos de calidad.