Juventud, goleado y al borde del abismo
Desahuciado. Juventud Antoniana cayó goleado como local ante 9 de Julio de Rafaela por 3 a 0, ayer por la tarde en el estadio Padre Martearena, y ahora su situación pasó a estado crítico: la permanencia pende de un hilo -o un milagro-.
Es que, para seguir con chances de “zafar” del descenso, la única opción que tiene el Santo es ganar o ganar la próxima fecha, penúltima y superclásico frente a Central Norte como visitante, y que Crucero no lo haga frente a Sarmiento de Chaco, porque si lo hace, sentenciará la pérdida de la categoría para el Antoniano, cualquiera sea el resultado que se de en Salta.
Si empata el elenco misionero, siempre y cuando Juventud gane, quedará incluso una posibilidad remota de salvación. Lo mismo si pierde. Pero, desafortunadamente, el peor enemigo del Santo es el Santo mismo: debe ganar, porque otro resultado lo condena, pero lo cierto es que no festeja desde hace 13 partidos. Y eso lo complica todo.
Ayer, frente a 9 de Julio, Juventud mereció goles, pero se topó con un Agustín Grinovero gigante en el arco visitante que tapó todas, literalmente, sobre todo en el primer tiempo que fue cuando el Santo atacó más. Le sacó el gol más de una vez a Juan Romero, siendo una acción del complemento la más increíble. Y en contrapartida, los Julianos consiguieron marcar en las pocas llegadas que tuvieron, con complicidad -para colmo- de los horrores defensivos del local.
- Los goles: Román Bravo abrió la cuenta a los 12’PT, Agustín López marcó a los 6’ST, y Brian Peralta a los 35’ST.
- Vallas y custodia en el Pistoia: Tras la derrota, la Policía valló las inmediaciones del Fray Honorato Pistoia. También hay custodia.