La decisión de la Corte Suprema que podría cambiar el destino de Nahir Galarza: “Nuevo juicio”
La joven, que fue condenada a prisión perpetua por el crimen de su novio, Fernando Pastorizzo, espera en la cárcel la revisión del fallo por parte del máximo tribunal.
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A cinco años del crimen de su novio, Fernando Pastorizzo, por el que fue condenada a prisión perpetua, Nahir Galarza espera a que la Corte Suprema se expida sobre la revisión del fallo.
Así lo informó su abogada, Raquel Hermida Leyenda, quien indicó que el proceso está “concluido a sentenciar”. “Se ha logrado que la Corte revise la totalidad de la causa, que fue requerida a Entre Ríos y la misma fue cursada al Procurador General de la Nación para que analice la investigación de Gualeguaychú”, celebró sobre el posible beneficio que podría obtener su defendida.
“Por un nuevo juicio, siempre apoyándote” concluyó sobre la presentación realizada en noviembre de 2020 ante el máximo tribunal. También incluyó la solicitud de un “recurso de revisión” ante la Fiscalía General en el que apeló la decisión del Ministerio Público de Gualeguaychú de desestimar la acusación que la joven hizo contra su padre, Marcelo Galarza, como presunto autor del crimen de Fernando Pastorizzo.
Esta versión fue ratificada por la joven en enero de este año ante el fiscal Mauricio Romero. En el mismo sentido denunció que su madre era víctima de violencia de género por parte de su padre.
Sin embargo su denuncia fue rechazada por la fiscalía, que indicó que “se debe proceder a la desestimación in límine en relación a lo expresado de que sería el Sr. Marcelo Galarza -padre de Nahir- el autor del homicidio de Fernando Pastorizzo”.
El caso
Fernando Pastorizzo fue asesinado en la madrugada del 29 de diciembre de 2017 de dos disparos en la espalda y en el pecho. A raíz de las pruebas en su contra, su novia, Nahir Galarza, que se encontraba con él, fue acusada y se defendió asegurando que le había disparado de forma “accidental” con el arma de su padre policía. El 3 de julio del año siguiente el Tribunal de Juicio y Apelaciones de Gualeguaychú la condenó a cadena perpetua. Un año más tarde esta decisión fue ratificada por la Sala II de la Cámara de Concordia.