La Industrialización, el gran ausente en la relación entre Perú y China
La Industrialización, el gran ausente en la relación entre Perú y China las oportunidades para el desarrollo industrial del país parecen estar quedando relegadas, generando inquietud entre expertos.
La medida que se acerca la apertura del Megapuerto de Chancay en noviembre de 2024, un informe reciente ha puesto en el centro del debate un tema preocupante: la falta de un plan claro para la industrialización en Perú.
A pesar de la histórica inversión china en este proyecto, las oportunidades para el desarrollo industrial del país parecen estar quedando relegadas, generando inquietud entre expertos y la población local.
El periodista español Juan Pablo Cardenal, conocido por su trabajo en temas de política y economía chinas, ha señalado en su informe “China in Peru: The Unspoken Costs of an Unequal Relationship” que la relación entre Perú y China es marcadamente desigual.
Mientras China se asegura el control del hub portuario más importante de América Latina, Perú parece no haber negociado condiciones que impulsen su desarrollo industrial.
“Perú aún no deja de ser un país con una economía que recuerda a los tiempos del virreinato”, comentó el excanciller peruano Miguel Ángel Rodríguez Mackay en una entrevista con Infobae Perú.
Según Mackay, la falta de un enfoque en la industrialización es una falencia histórica del país. “Perú debe ser capaz de elaborar plantas que permitan la fabricación de vehículos, desarrollar tecnología de punta, pero esto no se está viendo en la actual alianza con China”, añadió el exministro de Relaciones Exteriores.
La Perspectiva de los Economistas
Durante el foro ‘Perspectivas Económicas 2024-2025 y Acciones de Control y Anticorrupción en el Perú’, organizado por el Colegio de Economistas de Lima, el decano José Herrera subrayó la necesidad de que Perú aproveche la oportunidad que representa Chancay para planificar su infraestructura y mejorar la gestión del desarrollo productivo.
Herrera expresó a Infobae Perú que, aunque el Megapuerto es de propiedad privada, el Estado debería crear las condiciones necesarias para que este proyecto beneficie a la industria nacional. Sin embargo, al igual que Rodríguez Mackay, Herrera duda que este desarrollo se esté planificando de manera adecuada.
Preocupaciones Locales
Alejandro Chirinos, sociólogo de la ONG CooperaAcción, que trabaja en la gestión social y sostenible de territorios afectados por actividades extractivas, ha estado siguiendo de cerca la construcción del Megapuerto de Chancay.
En el informe de Cardenal, Chirinos compartió las preocupaciones de los habitantes de Chancay sobre el futuro. “Los chancayanos se preguntan qué ganarán ellos y sus hijos con estas inversiones”, dijo Chirinos.
El sociólogo también señaló que, aunque China necesita recursos para su propio desarrollo, no hay precedentes de países que se hayan industrializado bajo este esquema de cooperación. “No conocemos ninguna experiencia en la que se haya logrado la industrialización de un país mediante este tipo de proyectos”, afirmó Chirinos.
Un Futuro Incierto
A tan solo tres meses de la inauguración del Megapuerto de Chancay, la gran duda que persiste es si Perú logrará aprovechar esta oportunidad para impulsar su desarrollo industrial.
Aunque algunos sectores aún mantienen la esperanza, otros, como Chirinos, se muestran escépticos. La apertura del puerto podría marcar un hito en la relación entre Perú y China, pero la ausencia de un plan claro para la industrialización podría significar un futuro incierto para el desarrollo económico del país.