La nueva Champions se sorteó y tiene cruces inesperados
Una gran innovación en su formato de disputa sufrió uno de los torneos más importantes del continente europeo: la Champions League.
El nuevo formato de esta competencia para la temporada 2024/2025 ha generado un sinnúmero de repercusiones, tanto positivas como negativas. De hecho las modificaciones han sido profundas y esta experiencia la vivirán ahora los 36 clubes que tomarán parte de la misma.
No será una Champions League más en la historia, será una Champions que tiene varios cambios en su formato. La primera modificación dispuesta por la UEFA y que salta a simple vista es el aumento en la cantidad de clubes participantes, pasando de 32 a 36. Precisamente, ayer en Mónaco se realizó el sorteo de la etapa principal.
A partir de ahora, no habrá fase de grupos y en su lugar se hablará de aquí en más de la fase de ligas. Con el sorteo realizado los clubes conocieron el camino que deberán recorrer de cara a los playoffs del torneo, en busca de la gran final que se realizará el 31 de mayo de 2025 en Munich.
El italiano Gianluigi Buffon y el portugués Cristiano Ronaldo fueron los actores principales durante el sorteo. El arquero y el delantero fueron conformando los partidos de la fase de ligas.
Cada equipo jugará ocho partidos: dos contra rivales del bombo 1 (los de mejor presente), dos contra rivales del bombo 2, dos contra rivales del bombo 3 y dos contra rivales del bombo 4.
Una de las notas particulares de este nuevo formato es que los cruces no se repetirán de local y visitante como solía ser en las ediciones pasadas. O sea que cada equipo jugará un solo partido contra el rival con el que salió sorteado.
Cuatro juegos serán en casa -contra uno de cada bombo- y cuatro de visita -contra el otro de cada bombo-. Habrá que acostumbrarse ahora a una tabla general en la que se irán contabilizando todos los puntos de todos los clubes.
En esta tabla los primeros ocho se clasifican directamente a octavos de final, y del 9 al 24°, a los 16° de final.
El sistema determinó cruces atractivos tales como Real Madrid ante Borussia Dortmund, reeditando la última final, y Liverpool; o Manchester City teniendo que enfrentar al PSG y al Inter.