La suba de dietas de concejales generó polémica y malestar general en Embarcación
Una fuerte controversia política se desató en la ciudad de Embarcación tras la convocatoria a una sesión extraordinaria del Concejo Deliberante, impulsada por un grupo de ediles.
Se incluyó en su temario proyectos vinculados a la seguridad, la creación de nuevos cargos y una reestructuración salarial interna. La decisión generó críticas por el uso del mecanismo excepcional y por el contenido del orden del día.
Según el reglamento interno del cuerpo deliberativo, las sesiones extraordinarias deben convocarse ante hechos graves o situaciones urgentes y solo pueden tratar el tema específico que motiva su llamado. Sin embargo, en esta oportunidad, la convocatoria incluyó más de un punto, lo que despertó cuestionamientos tanto políticos como ciudadanos.
El primer punto del orden del día prevé una reunión con distintas unidades policiales para abordar cuestiones inherentes a la prevención y seguridad de la ciudadanía.
Si bien la inseguridad es una problemática real y creciente en la ciudad, sectores críticos sostienen que el tema fue utilizado como argumento para justificar una sesión extraordinaria que incorporó otros proyectos ajenos a una urgencia concreta.
En segundo lugar, el temario incluyó un proyecto de resolución para crear la Secretaría de Prensa y Difusión del Honorable Concejo Deliberante de Embarcación. La propuesta, impulsada por los mismos ediles, generó rechazo en parte de la comunidad, que cuestiona la necesidad de crear un nuevo cargo político en el actual contexto económico y social.
La mayor polémica, sin embargo, se concentró en el tercer punto del orden del día: un proyecto de resolución para la reestructuración económica de concejales y secretarios del Concejo Deliberante.
La iniciativa fue interpretada como un intento de aumento salarial encubierto, lo que profundizó el malestar social.
Todos los proyectos fueron presentados por los concejales Luciano Caballejo, Santos Cornejo, Martín Córdoba, Marinela Rodríguez y Ramiro Morales.
Críticos de la convocatoria señalaron que los concejales aún no iniciaron plenamente su labor legislativa y ya estarían impulsando mejoras en sus ingresos, en una ciudad atravesada por problemas estructurales como la inseguridad, la falta de empleo y las dificultades económicas de amplios sectores de la población.
También surgieron interrogantes sobre el impacto presupuestario de estas iniciativas y sobre la posición del Ejecutivo municipal. En ese marco, se mencionó la figura del intendente y del área de Hacienda, ante la posibilidad de que el Concejo avance con decisiones que impliquen mayores erogaciones.
La situación alimentó además críticas hacia los nuevos concejales, a quienes se acusa de reproducir prácticas tradicionales de la política local.



