La UNSa va a asamblea tras 20 años: ¿Qué es y por qué es importante lo que pase?
Desde las 9, en el anfiteatro G-400 del predio de la sede central, empezará a sesionar la Asamblea Universitaria, el máximo órgano de la UNSa. El órgano se constituye para evaluar señalamientos de la Corte Suprema de Justicia de la Nación sobre el estatuto de la casa de altos estudios. ¿Qué puntos se debaten y que cambios puede generar?
El rector Daniel Hoyos quien gobierna en la universidad desde abril – tras 12 años de gobiernos salidos de la Facultad de Ciencias Económicas – va a cumplir este lunes uno de sus compromisos asumidos de la campaña: llamar a la Asamblea Universitaria.
Este cuerpo está compuesto por todos los consejeros de la Universidad y de cada una de las facultades, electos por el voto de la comunidad y de cada claustro: docentes, trabajadores no docentes, graduados y estudiantes. Además también participan los decanos que gobiernan en cada facultad.
Es el máximo órgano de decisión que tiene la universidad y tiene la posibilidad de realizar cambios de gran relevancia internamente, modificando el estatuto que prevé el funcionamiento de la casa de altos estudios y pudiendo incluso hasta crear nuevas facultades. Define sus decisiones por la mayoría simple de los votos.
¿Qué tratará la asamblea?
El principal punto de discusión son las observaciones que la Corte Suprema de Justicia de la Nación realizo en la década del 90 al estatuto de la universidad. En esa instancia, la máxima entidad judicial remarcó que el estatuto estaba contradiciendo la Ley de Educación Superior sancionada durante el menemismo.
El punto observado es que la universidad salteña reconocía a la gratuidad de los estudios de grado dentro de su estatuto, mientras la ley establecía el acceso a los estudios universitarios de grado bajo el principio de equidad.
La diferencia radica en que el principio de equidad abre la posibilidad de permitir ciertos arancelamientos en las carreras de grado, dado que etimológicamente el concepto refiere a “dar a cada uno lo que se merece en función de sus méritos o condiciones”, es decir, que si hay posibilidad de que haya personas que paguen por el acceso a la educación superior, los mismos deberían hacerlo.
La ley del menemismo fue modificada durante el segundo gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, y en esa instancia la gratuidad quedó firme en la ley, y en caso de dar tratamiento a este punto, ya no habría posibilidad que de nuevo la justicia observe el estatuto de la universidad.
Si bien, ningún decano o asambleísta se ha pronunciado sobre este polémico punto, se espera que algunos de los participantes presenten el debate, que en caso de salir favorable abre la puerta al arancelamiento.
Otro de los puntos a tener en cuenta es lo que suceda con la actualización de la reglamentación universitaria con respecto a los concursos docentes y lo establecido por los Convenios Colectivos de Trabajo.
Este punto es crucial si Hoyos quiere regularizar la planta docente de la universidad, hoy en su mayoría interina. El problema radica en que el estatuto prevé que para que un docente acceda al cargo regular –es decir con mayor formalidad y mejores sueldos- se deben realizar dos concursos. Actualmente los convenios establecen que solo debe hacerse uno.
Esto ha generado ya una práctica común en cuanto a lo que son las impugnaciones por los cargos, ya que cuando se llama a concurso para que los docentes regularicen su situación, es común que los otros participantes del concurso impugnen la decisión de los tribunales evaluadores, ya sea o porque no cumplen con el estatuto o porque no cumplen con el convenio.
Fuentes del rectorado de la universidad afirmaron a Nuevo Diario que de actualizar el estatuto a lo que plantea el convenio colectivo, se podría avanzar en los llamados a concursos masivos para regularizar a la planta educadora de la universidad, una demanda del sector desde hace años.
Sin embargo, los gremios que estarán presentes en la asamblea, no tienen voto, por lo que estarán a esperas de lo que digan los asambleístas.
El reclamo de Orán y Tartagal
Dos delegaciones de estudiantes y docentes de las sedes regionales de Tartagal y Orán se encuentran ya en Salta. Llegaron con la intención de meter presión en la asamblea a sus participantes para que accedan al pedido histórico de las sedes de adquirir el status de facultad.
El debate no es sencillo, dado que hay espacios políticos de la UNSa que no coinciden con el reclamo. El motivo es que la universidad debería dividir su presupuesto en 8 en vez de 6, como sucede actualmente.
Además también está el debate sobre como readecuaran administrativamente a la universidad. Esto se debe a que en las sedes conviven carreras de todas las facultades, salvo Ingeniería.