Los 80 años de Caetano Veloso con un show junto a sus hijos y Maria Bethânia
El músico brasileño Caetano Veloso cumple 80 años y lo celebró ayer domingo con un show familiar en la que cantó junto a sus hijos Moreno, Zeca y Tom, y su hermana Maria Bethania. Se puede ver por streaming.
El espectáculo se realizó en el teatro Cidade das Artes, en Río de Janeiro para un selecto público y se transmitió a través del canal Multishow y de la plataforma de streaming Globo Play.
"Hoy es mi cumpleaños y decidí celebrar la fiesta de mis 80 años en una presentación con mis hijos y mi hermana con un show íntimo, pero con público y se transmitirá en vivo para los internautas y telespectadores", anunció el músico en Twitter.
"Siete mil veces volvería a vivir así", dijo Veloso al cantar "7.000 veces", uno de sus clásicos de los años ochenta, al lado de sus hijos, con quienes desde hace casi dos décadas viene tocando en vivo y grabando sus últimos trabajos.
En un concierto divulgado por las plataformas de la cadena Globo, los 80 años de Caetano llenaron de emoción el Teatro das Artes de Rio de Janeiro. Conmovido, Caetano agradeció a todos los amores de su vida y pasaron por allí Dona Canó, la madre que vivió 105 años y que se encuentra en forma de mito inspirador entre la familia Veloso.
Caetano también agradeció todas las experiencias afectivas de su vida, cuando la libertad, en un Brasil golpeado y censurado, significaba liberación, entre ellas a su primera esposa, Dedé, madre de Moreno, y a Paula Lavigne, con quien tuvo a Zeca y a Tom.
"Siento mucho agradecimiento a las mujeres de mi vida, a Dedé, madre de Moreno, y a Paulinha…y a algunos muchachos también, raros, fugaces, pero no menos importantes", dijo Caetano en 2022, pero podría ser el Caetano de 1982, siempre actual, innovador e interprete de cada rincón de este país continental llamado Brasil. En la platea, con barbijo, Gilberto Gil, quien este año también cumplió 80.
Gil y Veloso se llaman hermanos y forman un dueto imbatible desde que ambos fundaron, refundando la música brasileña, el movimiento cultural llamado Tropicalismo a fines de los años sesenta, que vino a redescubrir el modernismo del arte brasileño mediante la psicodelia, el rock, el samba reemplazando generacionalmente a la bossa nova. "Si no venís a tocar conmigo yo no voy a tocar más tampoco", le advirtió GIl en 1965 cuando ambos con 23 años, en Bahía, discutían su futuro musical, ante la disyuntiva de Caetano en pensar en estudiar filosofía o dedicarse a las artes plásticas, según cuenta en la autobiografía Verdad Tropical.
El show comenzó con un tema muy fuerte en lo afectivo para Caetano llamado "Como 2 e 2", escrito en Londres, durante su exilio ante la censura y persecución de la dictadura militar, luego de haber recibido la visita de Roberto Carlos, "El Rey". En el show Caetano alternó temas nuevos como "Meu Coco" y "Luz de Tieta" con clásicos como "Vocé é Linda" y compartió la interpretación vocal en la canción "Deusa de Amor" con su hijo mayor, Moreno.
Cantó en portugués y en la versión inglesa compuesta en el exilio de la canción "María Bethania" que permitió el ingreso al escenario de su hermana más famosa. Y la noche siguió con ambos cantando "Todo de Novo" y el hit "Reconvexo", con la platea de invitados llevados al delirio por los hermanos Veloso de Santo Amaro de Purificação, interior de Bahía.
Caetano a los 80 años ha vuelto a subir el tono de su voz política, sobre todo con la elección del 2 de octubre que definirá la continuidad o no de Jair Bolsonaro, hecho por el cual anticipó que votará a Luiz Inácio Lula da SIlva, con quien se había distanciado desde 2010.
Sobre todo porque recientemente Caetano Veloso declaró "no ser más un liberaloide" y defender al filósofo marxista Domenico Losurdo, en una revisión más de sus conceptos y preconceptos, confirmando que ningún dogma puede posarse para siempre en la máquina de invenciones de Veloso.
Con su estilo irreverente, tocó "Indio", una canción donde reivindica la sabiduría milenaria de los pueblos originarios de la selva mezclados con nombres como Mohamed Alí y Bruce Lee, y que ha ganado actualidad en el debate político brasileño. Lo mismo con "Luz do sol", una gema que habla de la fotosíntesis.
Para devolver el amor recibido, dijo, dedicó tres canciones a los "ochentosos" que cumplen su edad este año. Cantó "O Seu Amor", de Gilberto Gil, "A Terceira Margem do Rio", de Milton Nascimento, y el samba "Argumento", de Paulinho da Viola. Hubo también un momento familiar, nuevamente, para Irene, su hermana menor, a la que le hizo una canción luego de haber estado detenido en 1968 como preso político.
Los 80 años de Caetano Veloso al lado de la banda que comparte con sus hijos pone a Brasil nuevamente en estado de shock artístico junto al hombre frágil de voz de brisa que logró mezclar el samba, la psicodelia, los Beatles, Almodóvar, el cancionero latinoamericano, la bossa nova y convertirlo en la Tropicalia y, más tarde, en un estilo musical propio y único.
80 años de activismo social desde la música
A sus 80 años, Caetano Veloso es una de las figuras más importantes de la música latinoamericana, y se transformó en una referencia cultural y política con sus canciones en las que supo transmitir un mensaje asociado a la defensa de los derechos humanos.
Nació en Santo Amaro, Bahía, al norte de Brasil. Es el quinto hijo de una numerosa familia, llegó a Río de Janeiro a principios de los 60 con la tarea encomendada por su padre de "cuidar" a su hermana menor, Maria Bethania, que había sido elegida para un show musical. Ambos estudiaron la carrera de Arte durante algunos años, pero debieron abandonarla con el avance de la dictadura cívico militar que los empujó al exilio en Europa.
Uno de sus rasgos distintivos es la carga ideológica de sus canciones y presentaciones. Desde la militancia en su juventud, que lo llevó a la prisión por dos meses junto a su colega y amigo Gilberto Gil durante la dictadura militar por presunta "incitación a la subversión y al desorden", hasta el permanente rechazo a las políticas de ultraderecha ejercidas por el actual presidente Jair Bolsonaro y la previa pelea por la libertad del ex mandatario Luis Inácio Lula da Silva.
Su cercanía con el púbico argentino también tiene muchos años de historia, es capaz de llenar cualquier teatro en cuestión de horas y se ha presentado con los músicos más importantes de la cultura nacional como Mercedes Sosa y Charly García.
En los últimos años eligió compartir escenario con sus tres hijos, que hicieron sus propias carreras musicales. Además, en 2021 lanzó Meu Coco, un disco con canciones de su autoría, grabado en la soledad desde su pequeño estudio en Rio de Janeiro durante la etapa de aislamiento social obligatorio por el avance del covid-19.
Compositor único, poeta, intérprete refinado, performer y agitador permanente, el músico brasileño cumple este domingo 80 años convertido en una de las personalidades insoslayables y referencia ineludible de la cultura popular de su país y de América Latina de los últimos 50 años.
Compositor único, poeta, intérprete refinado, performer y agitador permanente, el músico brasileño Caetano Veloso cumple este domingo 80 años convertido en una de las personalidades insoslayables y referencia ineludible de la cultura popular de su país y de América Latina de los últimos 50 años.
Nacido en la localidad de Santo Amaro, Bahia, como quinto hijo de una numerosa y abierta familia del nordeste brasileño, Caetano llegó a la música casi "involuntariamente", como señaló alguna vez y mientras soñaba con convertirse en realizador cinematográfico, anhelo irrealizado que mantuvo vivo durante años.
Como cuenta en su libro biográfico "Verdade Tropical", llegó a Río de Janeiro acompañando a su hermana María Bethania -cuatro años menor que él- que había sido convocada para un espectáculo musical, siguiendo el pedido de su padre de que la "cuidara".
Antes habían estado juntos en la ciudad de Salvador, donde Caetano estudió la carrera de Arte, que abandonó en medio de la dictadura (1964-1985), ante el clima que comenzó a respirarse en la universidad.
Fue durante la dictadura también que estuvo en prisión por dos meses y luego otros cuatro con arresto domiciliario, pena que sufrió junto a su entrañable amigo Gilberto Gil y con quien marchó al exilio en 1969, pasando por Lisboa y París hasta afincarse en Londres, de donde volvió en 1972.
Más de una vez y con distintas palabras contó -para evitar posibles confusiones y marcar, al mismo tiempo, las aristas de una figura siempre excéntrica, corrida de los pensamientos hegemónicos- que para la época en que los detiene la dictadura, acusándolos de "terrorismo cultural" y de "subversión e incitación al desorden", él y Gil eran resistidos por los universitarios de izquierda que los acusaban de extranjerizantes y difusores de la penetración cultural imperialista por reivindicar el rock, el pop y la música eléctrica.
María Bethania le grabó su primera canción, que le abrió las puertas para el registro de "Domingo", álbum debut que lo tuvo como compositor e intérprete junto a Gal Costa, y que fue el inicio de una carrera fulgurante y sorprendente por las innumerables resonancias y significantes que puso en circulación.
Promotor de la diversidad cultural y sexual en los tempranos 80, defensor del medio ambiente, la Amazonía y los pueblos originarios, Caetano estableció como artista un diálogo permanente con su territorio y su época con un fino oído para escuchar demandas y pulsiones subterráneas y sin desconocer las conexiones más amplias del mundo ni desentenderse de sus tradiciones creativas.
Tropicalismo
Fue, con Gil, Gal Costa, su hermana María, Tom Ze y los psicodélicos de Os Mutantes liderados por Rita Lee, el autor intelectual y material del tropicalismo, género que le puso electricidad y rock a la tradición musical de su país y que tuvo ecos planetarios, modificando para siempre el mapa sonoro de la Música Popular Brasileña (MPB).
Con el tropicalismo retoma en clave de música popular el concepto de antropofagia cultural esbozado en la Semana de Arte Moderna de 1922 en San Pablo y transforma para siempre la música del Brasil, volviéndola cosmopolita, relacionándola con el rock y marcando un camino de mestizajes que desconoce los prejuicios, y que se ha convertido en marca indeleble de la MPB con el paso del tiempo.
De la década del 70 son perlas discos como "Muito", "Bicho", "Cinema Trascendental" y el registro "Caetano e Chico Ao Vivo"; de los 80 "Cores, Nomes", "Outras Palabras" y "Estrangeiro" y de los 90 maravillas como "Circulado", "Circulado Vivo", "Tropicalia", "Livro", además de "Fina Estampa", donde por primera vez recorre el cancionero de música latinoamericana en castellano.
Los 2000 lo sorprenden con "Noites do Norte" y luego con el proyecto Ce, en el que trabaja en formato de power trío con músicos muy jóvenes un rock experimental, duro y de vanguardia que no gustó a todos y que él mismo, en charla con esta agencia, definió como "una radicalización del tropicalismo cincuenta años después".
Sueño creativo
En esa misma entrevista, que antecedió al primer arribo de esta banda al país, señaló: "Creo que Brasil es original y eso es fatal: somos un país de dimensiones continentales, un país americano que habla portugués, que tiene la población más racialmente mixturada del mundo".
"Definitivamente la del Brasil es una originalidad compulsiva, y por eso creo que los músicos tenemos que asumir esa originalidad y ofrecer algo interesante al mundo. Es nuestra obligación", agregó.
"La del Brasil es una originalidad compulsiva, y por eso creo que los músicos tenemos que asumir esa originalidad y ofrecer algo interesante al mundo. Es nuestra obligación"
"La canción popular -sostuvo- es quizás, con el fútbol, la única área de la creación brasileña que pone en práctica lo que para mí es el sueño creativo: hacer de la originalidad brasileña, toda constituida de desventajas, una bendición y un ejemplo para el mundo. Yo creo que la canción brasileña es un boceto de este sueño".
Después de la experiencia de Ce, Caetano, que armó una entrañable y profunda relación con el público argentino desde comienzos de la década del 80, volvió al país pero con formatos acústicos: en dúo con María Gadú, con su coequiper Gilberto Gil y con sus hijos Moreno, Zeca y Tom.
En 2021 lanzó "Meu Coco", un disco de canciones propias, grabado en la soledad de su pequeño estudio de Rio de Janeiro en tiempos de confinamiento por la Covid-19 y donde revalida muchos de los títulos cosechados en décadas.