Los anunciados aumentos en las cuotas de la Católica generaron una sentada y gran preocupación
Un grupo de estudiantes de distintas carreras de la Universidad Católica de Salta realizaron ayer una sentada en el campus de la citada casa de estudios para reclamar por un nuevo aumento en las cuotas.
A ello se suma la preocupación por los montos de las matrículas para el 2023, por lo que muchos verían peligrar la continuidad en el cursado de sus carreras.
"Esperamos que la situación pueda resolverse en beneficio de todos los estudiantes", señaló a Nuevo Diario una alumna que formó parte del reclamo y que prefirió reservar su identidad, al tiempo que expresó su profunda preocupación ante lo que considera "un aumento totalmente desmedido" que suma en lo que va del año un 55% y alcanzaría un 70%, de concretarse la suba pautada para el mes de octubre.
"Lamentablemente todavía no se pudo llegar de inmediato a una reunión con las autoridades porque nos ponen excusas a la hora de escucharnos", dijo y detalló que los aumentos que ya sucedieron fueron: Marzo 40%, Agosto 15%. "Y ahora nos quieren incrementar en Octubre otro 15% que en total suman 3 aumentos sumamente elevados e insostenibles para la comunidad estudiantil", añadió la alumna que recalcó el reclamo pacífico del estudiantado en la jornada de ayer.
Así, la joven detalló a este medio los desmedidos aumentos en las cuotas que, cabe aclarar varían según la carrera: los precios rondan entre los $25.000 a $35.000, que con el incremento que la institución quiere imponer se aumentarían esos valores de $30.000 a $40.000 por mes, recordando que para 2022 la matrícula tuvo un valor de casi $30.000
"¿Cuánto se espera que suba para el año? No tenemos conocimiento de a cuánto se elevará ese valor para el año que viene, pero en el 2021 pagamos casi $20.000", analizó y advirtió sobre la preocupación de aquellos estudiantes oriundos del interior de la provincia, y que deben además hacer frente a otros gastos: "Hay muchos chicos que se ven obligados a dejar sus carreras por este tipo de medidas y es una verdadera pena ya que les están y nos están quitando el derecho a estudiar".
A ello se le suma la falta de representatividad de los estudiantes, lo cual dificulta acceder a información o al diálogo con las autoridades de la casa de altos estudios: "Esperamos que haya una pronta respuesta contundente, porque hasta ahora solo han sido excusas. Por ahora trataremos de convocar más apoyo entre los medios para ser escuchados, y próximamente estaremos coordinando con los demás alumnos más manifestaciones. La intención es manejar esto desde el respeto, pero lamentablemente nos están pasando por alto", concluyó.
Baja calidad educativa
“Queremos que la UCASAL preste finalmente atención a nuestros reclamos, porque nos están dando demasiadas excusas frente a estos aumentos tan grandes y consecutivos en las cuotas para todas las carreras, y queremos que al menos haya algún tipo de congelamiento como medida concreta”, señalaba otra de las estudiantes que convocaba a los chicos, chicas y padres a formar parte del reclamo.
A este repudio generalizado se le suma otro que no resulta menor: según indicaron, estos incrementos no reflejan ni cubren en términos de calidad educativa, atento a que abundan también las quejas por falta de material bibliográfico, entre otras cosas.
Según señalaron, para carreras como las de abogacía, cuentan con una mínima cantidad de libros para un gran número de alumnos inscriptos.