Marcha del orgullo LGTBIQ+ contra las políticas de odio e invisibilidad

La emblemática esquina de Lavalle y San Martín volvió a llenarse, como cada noviembre, de purpurina, arcoíris y música. Sin embargo, esta vez, al orgullo LGBTIQ+ se le sumó una nota de tristeza y dolor.

Quizás la lluvia fue el reflejo de ello, frente a los discursos de odio provenientes de un gobierno nacional de corte liberal-libertario, que elige invisibilizar, reavivar miedos e intentar, incluso, “devolver al clóset” lo que no volverá jamás. En ese marco, el grito de las disidencias sexuales volvió a ganar las calles salteñas, con marcadas consignas y preocupaciones crecientes, pero con la fuerza de las capitanas mariposas Lohana Berkins y Pelusa Liendro, que seguramente sobrevolaron la marcha de ayer.

En la previa, se instalaron tendederos artísticos que dieron espacio a diversas expresiones, todas bajo una misma bandera: el rechazo a la avanzada del gobierno libertario sobre los derechos de la diversidad, los discursos de odio, la retirada del Estado y el ajuste.

La fecha de la convocatoria tampoco fue casual: este 29 de noviembre se cumplieron 18 años del crimen que marcó un antes y un después en Salta para el movimiento travesti-trans, tras el travesticidio de Pelusa Liendro.

Pelusa organizó la primera marcha del orgullo gay en Salta y, mediante una serie de manifestaciones, abrió la conciencia colectiva sobre la existencia de miles de personas transexuales que, unidas, comenzaron a desafiar la hipocresía, el machismo y a visibilizar el horror de la violencia subterránea y delirante que sufrían en un contexto conservador y negador. Este activismo le costó la vida el 29 de noviembre de 2006.

Pelusa fue la semilla, y detrás de ella florecieron más luchas y reivindicaciones que hoy se encuentran amenazadas ante la invisibilización y el odio a la diferencia. Así lo expresaron ayer desde MTA Movimiento Trans Argentina, a partir de un fuerte documento de repudio a la creciente amenaza representada por el gobierno nacional de Milei, su partido político y todos los movimientos de extrema derecha, cuyas acciones y discursos están socavando los principios fundamentales de la democracia, la justicia social y los derechos humanos en Argentina.

“A lo largo de este año vimos cómo este gobierno, con su retórica de odio, discriminación y violencia, no solo pone en riesgo los avances sociales que hemos logrado con esfuerzo y unidad, sino que también ataca las instituciones de derechos humanos, el marco normativo que nos dimos -LEY DE CUPO TRANS Y LEY DE IDENTIDAD DE GÉNERO. Promoviendo la fragmentación de nuestras sociedades, alimentando la transfobia, el trans odio, el machismo, la homofobia y otras formas de intolerancia hacia las personas”, detallaron a colación de los recientes anuncios de eliminación de estas conquistas, por parte del Gobierno Nacional.

Datos sobre crímenes de odio

Durante 2023 (último dato disponible), en la Argentina hubo 133 crímenes de odio en donde la orientación sexual, la identidad y/o la expresión de género de todas las víctimas fueron utilizadas como pretexto discriminatorio para la vulneración de derechos y la violencia, según el último informe del Observatorio Nacional de Crímenes de Odio LGBT.
La cifra significa un aumento respecto de 2022, donde hubo 129 crímenes de odio. El año anterior habían sido 120. Las personas más afectadas, como cada año, son en un 88% mujeres trans (travestis, transexuales y transgéneros). Esto es 118 casos. Le siguen los varones gays cis con 7 casos, los varones trans (3), las personas no binarias (3) y las lesbianas (2).

Empleo travesti trans

Según el último informe del Registro Único de Aspirantes Travestis, Transexuales y/o Transgénero “Diana Sacayán-Lohana Berkins”, por la Ley N° 27.636 -que dependía del ex Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidades-, al 31 de agosto de 2023 había 955 personas trans empleadas en el Sector Público Nacional.
Aunque la ley sigue vigente, de acuerdo con datos del Observatorio Transindical de Trabajadores TTNB (Travestis, Trans y No Binaries) en el Estado, hasta el 8 de abril último se había registrado el despido de 100 personas trans, lo que representa casi el 10% del cupo alcanzado en 2 años y medio (955 personas contratadas).