Monseñor Quintana y el Milagro: “la vida entera es una peregrinación hacia el Padre”

Con una misa estacional celebrada en la Catedral Basílica de Salta, dio inicio el Triduo de Pontificales en honor a la Solemnidad de la Bienaventurada Virgen del Milagro. La homilía estuvo a cargo del obispo de Cafayate, Diego Quintana.
Esta ceremonia marcó el comienzo de las festividades religiosas más importantes de la provincia.
El gobernador Gustavo Sáenz, acompañado por su esposa Elena Cornejo, estuvo presente en la primera jornada del Triduo, que cada año convoca a miles de fieles.
El obispo de Cafayate, monseñor Quintana agradeció al arzobispo de Salta, monseñor Mario Antonio Cargnello, la invitación a celebrar esta fecha tan especial.
Durante su homilía, Quintana destacó el profundo significado de la Virgen del Milagro como símbolo de protección y fe, en especial en tiempos difíciles.
“La Virgen es ejemplo de fortaleza, de escucha atenta a la palabra de Dios”, expresó el obispo, quien además subrayó la importancia de mantener viva la esperanza, especialmente en este tiempo marcado por el Jubileo 2025 bajo el lema ‘Peregrinos de Esperanza’.
Monseñor Quintana también se refirió a los peregrinos como “la gracia del encuentro” y recordó que “la vida entera es una peregrinación hacia el Padre Celestial y la vida eterna”.
Más adelante Quintana hizo referencia a que vivimos tiempos difíciles marcados por la guerra, el narcotráfico, las adicciones, la corrupción, la falta de empleo digno y las deficiencias en salud y educación. Frente a esta realidad, la Virgen María se presenta como un ejemplo de fortaleza y fe. A pesar de la incertidumbre, confía en la Palabra de Dios, escucha con atención y espera con esperanza en sus promesas.
También recordó al papa Francisco que al proclamar el Jubileo del 2025 estamos viviendo: “Debemos avivar la llama de la esperanza que se nos ha dado y ayudar a todos a encontrar nuevas fuerzas y certezas, mirando al futuro con espíritu abierto, corazón confiado y visión de futuro. El próximo Jubileo puede contribuir enormemente a restablecer un clima de esperanza y confianza como preludio a la renovación y al renacimiento que tanto deseamos”, señaló.
Previo a la bendición final, monseñor Cargnello elogió el compromiso de los peregrinos y de quienes los acompañan: “Son un testimonio vivo de que una sociedad diferente es posible”, señaló.
En esta oportunidad, la música litúrgica estuvo a cargo del coro de la Universidad Católica de Salta, que interpretó obras del barroco misional de las misiones jesuíticas chiquitanas de Bolivia. Cargnello destacó la calidad artística de estas composiciones y señaló que “la Iglesia, cuando se pone al servicio del prójimo, dignifica y conmueve”.
Entre los asistentes se encontraban también autoridades eclesiásticas nacionales e internacionales, como el secretario de la Nunciatura Apostólica en Argentina, monseñor Daniele Liessi, y los obispos eméritos de Canelones (Uruguay) y Venado Tuerto. También participaron el vicegobernador Antonio Marocco, el ministro de Gobierno Ricardo Villada, fuerzas de seguridad y otros funcionarios.
El Triduo recuerda el milagro ocurrido en 1692, cuando un fuerte terremoto sacudió la región y los fieles atribuyeron la protección de Salta a la intervención del Señor y la Virgen del Milagro.
Música de las misiones jesuíticas en el Triduo
La música barroca, específicamente obras misionales jesuíticas de la Chiquitanía, del oriente boliviano se interpretó en la misa del Triduo de este Milagro.
Estas piezas musicales destacan por su alta calidad y capacidad de emocionar a los fieles.
Esta tradición busca conectar con la fe a través de piezas musicales que dignifican la experiencia religiosa, en el marco de las celebraciones que recuerdan la intercesión de la Virgen y la protección del Señor del Milagro. Asi opinaron especialistas de este arte.
Tradición y calidad:
Se utilizan piezas del barroco misional, conocidas por su elevada calidad y la capacidad de generar emociones, tal como lo hace la música barroca en otras partes del mundo, incluyendo el barroco veneciano.
Conexión emocional:
La Iglesia Católica, desde el Concilio de Trento, ha fomentado el uso de arte y música que se conecte emocionalmente con los creyentes y sea comprensible para ellos.
Mensaje religioso:
La elección de esta música busca transmitir un mensaje de servicio y devoción, uniendo a la comunidad en la renovación de su fe durante el Triduo.
Las piezas que se interpretan provienen de misiones de la Chiquitanía, adaptando el estilo barroco a la región y transmitiendo la espiritualidad local.
La Chiquitanía es una región natural y cultural del sudeste de Bolivia, conocida por ser el bosque tropical seco más grande del mundo, con una rica herencia jesuítica y la presencia del pueblo indígena chiquitano. Destaca por su arquitectura misional y la preservación de tradiciones.
El resguardo y recuperación de esas piezas musicales hicieron que lleguen a nuestros días.