El periodista Raúl Costes quien trabaja en Salvador Mazza, se encuentra atravesando una situación en la que entiende, se trata de una persecución por parte de la policía, atendiendo a que fue testigo, por su cobertura en el momento, del operativo de Gendarmería en el que se incautaron 420 kilos de cocaína, en un móvil policial.
Ese día, dos policías fueron detenidos y un tercero quedó prófugo, sin que se lo haya encontrado hasta el momento. Se asegura, cruzó a Bolivia.
“Aquel día, que se cumple (por ayer un mes) estuve a los 10 minutos de iniciado el procedimiento”, dijo.
Esto derivó a su entender, en una situación extraña cuando a las dos semanas, en oportunidad que dos delincuentes, haciéndose pasar por policías en moto, asaltaron a un ciudadano que caminaba hacia la terminal de ómnibus en Salvador Mazza. “El hombre debía viajar a Neuquén, la hija me mandó un video con el asalto de su padre y un texto. Lo que yo hice fue subirlo como noticia, al video y al texto, a mi sitio de internet”, recordó.
Fue que luego, a los dos días se presentó en su casa un muchacho, que tiene antecedentes delictivos y enojado le recriminó, “que lo detuvieron por una hora, porque el policía que lo detuvo le dio mi nombre. Le había dicho que yo aporté la información para que lo detuvieran”.
Su preocupación es que en esa casa vive con sus hijos de 9, 10 y 15 años, “lo calmé, para evitar males mayores, y mi hija grabó el audio con el nombre del policía que este hombre me dio. Más allá si él era o no el delincuente, que participó del robo, lo que me llama la atención, porqué el policía que detiene a una persona, me incluye a mí en esa situación y aunque así sea, como se puede señalar a un ciudadano, que pudiere haber aportado ese dato, para esclarecer un hecho”, dijo asombrado.
Aclaró que esto deja a la policía mal parada ya que la comunidad, en qué medida puede confiar, al denunciar algún delito.
Todo esto lo contó Costes en su programa de radio de los días domingos, “por supuesto con el nombre del suboficial que me había mencionado, el detenido que me reclamó, porque yo lo había involucrado, a pesar que todo eso es falso”, dijo Costes.
Agregando que luego visualizó el perfil en Facebook del policía, donde, se mostraba con grupos de gente tomando cerveza, fumando, con otros muchachos, etc. “Fue que ahí me sorprendí por los que tienen la responsabilidad de seleccionar a los aspirantes de la escuela de Policías que no ven un poco más allá, en el pasado de estos hombres. Ya que solo piden un certificado de buena conducta, o de antecedentes”.
“Tras ese comentario llegaron a mi casa, en horas de la tarde, otros dos policías con una citación porque había sido denunciado, por ese policía, en lo civil, por haber manchado su honorabilidad. La verdad que ahora estoy con abogado, y yo también le hice una denuncia por que quiero se investigue cuándo le envió la información sobre mi persona al delincuente que detuvieron y a la hora se lo liberó.
Calculo que esta animosidad es porque estuve en ese operativo de los policías y la droga”, aseguró Raúl Costes.