Pese a la situación crítica, el refugio municipal no tuvo plazas llenas
En un año, se ocuparon más de 6.500 plazas en el refugio municipal. La cifra corresponde al período en el que el albergue de la comuna comenzó a funcionar con modalidad transitoria, desde las 20 hasta las 8 del día siguiente.
El refugio, ubicado en Buenos Aires 930, tuvo un total de plazas ocupadas de 6.663. Silvia Varga, secretaria de Desarrollo Humano, manifestó a Nuevo Diario que dicho número refleja que, en promedio, se utilizaron 18 plazas por días cuando la capacidad máxima es de 28.
Desde que comenzó el año 2023, durante el mes de enero se ocuparon 620 plazas, mientras que en febrero fueron 601, en marzo 720, en abril 688 y en mayo 446. Ante ello, Varg remarcó que “el ingreso es voluntario”. “La persona que necesite o quiera pernoctar en el refugio tiene que llegar a partir de las 20 horas. Es decir, el refugio es para personas que busquen concurrir al lugar para pasar la noche”, indicó.
Además, remarcó que quienes asisten al lugar, cuentan con una cama para pasar la noche, baño para aseo personal, cena y desayuno.
Si bien indicó que la Municipalidad no se encarga de realizar relevamientos sobre todas las personas en situación de calle, el ingreso “oscila”.
Varg también destacó que, de acuerdo al último informe, el 35% de las personas asistentes corresponde a personas de la capital, 28% del interior de la provincia, 27% del interior del país y el 10% restante a extranjeros.
En ese sentido, señaló que la cantidad de personas del interior de la provincia da cuenta de una falta de este tipo de servicios en otros municipios.
“Nuestro refugio funciona desde el 2020, fue creado en el marco del programa Salta Te Cuida y tuvo mucho que ver con la situación del Covid. Nosotros lo creamos para asistir a personas con altas vulnerabilidad y desde entonces, el servicio nunca fue interrumpido. Lo mantuvimos y de manera permanente”, remarcó.
La recepción y permanencia en el refugio está sujeta al cumplimiento de las normas de convivencia, que establecen que no se puede concurrir bajo los efectos de bebidas alcohólicas o estupefacientes.
Quienes asistan, de forma voluntaria, pueden también solicitar al municipio la atención de algún tipo de servicio municipal en pos de mejorar su situación actual, pero en general – informó Varg – solo asisten a pasar la noche.