Polémica en Chicoana por el reemplazo de la empresa de transporte El Trébol

La decisión del municipio de Chicoana de adquirir dos unidades de transporte nuevas y desplazar a la histórica empresa local El Trébol desató un fuerte reclamo por parte de vecinos de los parajes del departamento, quienes expresaron su malestar a través de una carta pública y declaraciones a Nuevo Diario.
La empresa El Trébol, conducida actualmente por Ángel Aparicio, prestaba el servicio de transporte desde mediados de los años 90, conectando parajes como El Mollar, Bella Vista y Las Margaritas con los centros urbanos de Chicoana y Rosario de Lerma.
Lo hacía sin subsidios estatales y muchas veces enfrentando condiciones adversas en rutas deterioradas o directamente intransitables durante la temporada de lluvias.
Según manifestaron los vecinos, la empresa había funcionado durante décadas mediante acuerdos informales con el municipio y garantizaba el acceso al transporte para estudiantes primarios, secundarios y terciarios de zonas rurales, muchos de los cuales lograron completar su formación gracias a abonos accesibles.
Sin embargo, en las últimas semanas —en coincidencia con el año electoral— el municipio anunció la incorporación de dos colectivos nuevos, adquiridos por un monto estimado de 35 millones de pesos cada uno.
“Después de Pascuas, desde el municipio se comunicaron con Aparicio y le dijeron que ya no puede prestar el servicio porque sus unidades no reúnen los requisitos que solicita la Autoridad Metropolitana del Transporte (AMT) y que, de hacerlo, iban a dar aviso a la Policía Vial”, contó otra vecina.
En este punto, el dueño de la empresa confirmó a Nuevo Diario que en este año no pudo poner en servicio sus dos colectivos debido a que uno de ellos se encontraba en el taller a causa del mal estado de las rutas.
La compra
La operación se realizó sin licitación pública, lo cual generó cuestionamientos legales y políticos por parte de la comunidad.
Citan como sustento el artículo 15 de la Ley 8.072 y su decreto reglamentario, que obliga al llamado a licitación para contrataciones que superen un determinado monto.
“La compra se hizo sin participación ciudadana, sin transparencia y justo en campaña”, señala uno de los párrafos de la carta de lectores difundida por los vecinos, quienes además cuestionan la sostenibilidad del nuevo servicio municipal ante las mismas dificultades viales que enfrentó históricamente El Trébol. “¿Alguien gestionó al menos un kilómetro de pavimento por año?”, se preguntan.
Otro de los puntos de conflicto es el aumento del costo de los abonos para estudiantes secundarios, que pasarían a costar $36.000 mesuales.
En comparación, señalan que, en otras zonas de la provincia, como el área de cobertura de SAETA, el pasaje estudiantil es gratuito en virtud de la Ley 7322.
Los vecinos se preguntan si Chicoana está adherida a esa normativa, y denuncian que el nuevo esquema podría condicionar la libertad de elección escolar.
También se plantean dudas sobre el funcionamiento del nuevo sistema: si los choferes serán empleados municipales, si la empresa será estatal o concesionada, y por qué no se optó por fortalecer al prestador existente mediante subsidios y obras de infraestructura en vez de reemplazarlo.
La carta cierra con una advertencia a los organismos de control: piden que se audite el verdadero costo de las unidades adquiridas y se indague si existió algún tipo de indemnización para la empresa desplazada tras décadas de servicio sin respaldo estatal.
Cabe aclarar que el nuevo servicio que puso en funcionamiento el municipio de Chicoana lleva el nombre de “El Chicoanista”, rememorando el primer servicio municipal de transporte que tuvo la comuna.