Por la crecida en las Cataratas del Iguazú cierran la Garganta del Diablo
El caudal del río Iguazú se multiplicó 10 veces debido a las intensas lluvias. La crecida extraordinaria obligó a evacuar los circuitos turísticos y a cerrar recorridos emblemáticos. Las intensas lluvias en territorio brasileño provocaron la crecida de los ríos Iguazú y Uruguay. Hubo desbordes en los cursos de agua.
El impresionante aumento del caudal del río Iguazú obligó a las autoridades a activar los protocolos de seguridad y cerrar temporalmente algunos de los circuitos en las Cataratas del Iguazú, como la emblemática garganta del diablo. También se cancelaron los paseos náuticos.
Las imágenes en las redes sociales muestran el nivel y la fuerza con la que el agua atraviesa el circuito turístico sobre el nivel de las pasarelas de circulación del público.
La crecida se debe a las intensas lluvias que se registraron en la parte alta de la cuenca, sobre Brasil. Para la noche del miércoles, el caudal en las cataratas alcanzó 14,5 millones de litros de agua por segundo, lo que representa 10 veces más que el caudal normal.
El intendente del Parque Nacional Iguazú, Atilio Guzmán, informó que ya el martes se rebatieron las barandas de la pasarela para evitar la resistencia con el agua. “Aproximadamente a los 9 mil metros cúbicos el agua llega a nivel de pasarela. Ahora tenemos 11 mil metros cúbicos” explicó el funcionario, y agregó que “hasta que las condiciones no mejoren y baje el caudal, el circuito va a permanecer cerrado a los visitantes”.
Además, Guzmán explicó que hay 13 represas sobre la cuenca del río Iguazú, y que esto hace fluctuar los caudales. “Pero llega un punto en que las represas no pueden permanecer cerradas y eso produce esta creciente extraordinaria, que tiene su origen en la gran cantidad de precipitaciones que hay en toda la cuenca”, agregó.
El cierre afecta a unos 2 mil turistas que aún se encuentran en la zona, luego de un fin de semana que alcanzó a tener 30000 visitantes.
“El martes al mediodía comenzamos la evacuación. Por suerte no tuvimos que cerrar en ese momento, porque hubiera tenido mucho más impacto”, sostuvo el funcionario.
Estiman que la Garganta del Diablo permanecerá cerrada al menos durante todo el jueves. “Tenemos que esperar a ver qué sucede en toda la cuenca. Por lo pronto, en la cuenca superior ya ha dejado de llover. Tenemos que ir viendo el monitoreo de las represas y ni bien lo permita el caudal volveremos a abrir”, explicó Guzmán.