Preparan una tercera marcha universitaria que se definió en asamblea Interfacultades
Mientras la situación presupuestaria no mejora, la Asamblea Interfacultades resolvió convocar a una tercera Marcha Federal Universitaria para el próximo 12 de noviembre.
De la asamblea participaron estudiantes y agrupaciones de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) y a la Universidad Nacional de las Artes (UNA). En estos días, la medida deberá ser debatida, y por ende aprobada, por universidades de todo el país.
Si bien la marcha todavía será analizada en los próximos días, para esta semana ya está confirmado un corte de calles en el Obelisco para este 1° de noviembre y una movilización a la Plaza de Mayo y a la sede de la Confederación General del Trabajo (CGT) para pedirles que se convoque a un paro nacional el día mismo de la nueva Marcha Universitaria.
Además, el próximo 5 de noviembre a las 17 se realizará una reunión en la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA, donde participarán centros de estudiantes y gremios docentes y no docentes de todo el país, para organizar la tercera movilización universitaria federal.
A su vez, hay decenas de facultades de todo el país que continúan realizando protestas tras el veto a la ley de Financiamiento Universitario. Confirmaron que las tomas se mantendrán entre el lunes 28 y el miércoles 30 y habrá clases públicas hasta el final del cuatrimestre.
En medio de los múltiples reclamos, el Poder Ejecutivo continúa con el plan de avanzar con las auditorías de la Sindicatura General de la Nación (SIGEN), iniciativa que la UBA rechazó porque sostiene que el Presidente de la Nación quiere “intervenir en las universidades públicas” con el fin de “controlar lo que se enseña y aprende”.
La entidad informó, por medio de un comunicado, que realizará una convocatoria nacional e internacional para que todos los profesionales independientes “realicen una auditoría especial sobre su sistema de control interno”, con el objetivo de dar datos transparentes y de acceso público, al mismo tiempo que pretende “defender” el “principio de la libertad de cátedra” que tuvo desde siempre.