Recomiendan la consulta médica temprana para atemperar los síntomas del Alzheimer
El 21 de septiembre se conmemora el Día Mundial de la enfermedad de Alzheimer y es por ello que el Ministerio de Salud Pública recomienda la consulta temprana, que puede mejorar -temporalmente- los síntomas, el rendimiento de la memoria o retardar su progresión.
En la ciudad de Salta, el hospital Señor del Milagro cuenta con servicio de Neurología, en el cual se asiste a pacientes con esta patología.
Aquellas personas que tengan síntomas compatibles con la enfermedad, o sospechen de algún familiar, pueden solicitar el turno en ese nosocomio a través de la línea gratuita de Atención Ciudadana 148, o bien personalmente, de lunes a viernes, desde las 7, por la ventanilla de Estadísticas con el documento de identidad.
La enfermedad es un trastorno neurológico progresivo que hace que el cerebro se encoja (atrofia) y que las neuronas cerebrales mueran.
Es la causa más común de demencia -un deterioro continuo en el pensamiento, el comportamiento y las habilidades sociales- que afecta la capacidad de una persona para vivir de forma independiente.
Los signos tempranos de la enfermedad incluyen el olvido de eventos o conversaciones recientes. A medida que progresa, una persona con Alzheimer presentará deterioro de la memoria y perderá la capacidad para llevar a cabo las tareas cotidianas.
La enfermedad de Alzheimer es la forma más común de demencia y es actualmente la séptima causa principal de muerte entre todas las patologías y una de las principales causas de discapacidad y dependencia entre las personas mayores a nivel mundial.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de 55 millones de personas viven con demencia en todo el mundo y hay casi 10 millones de casos nuevos cada año.
La enfermedad de Alzheimer es una enfermedad grave y desafiante, y se pensó que se había cambiado el rumbo al reducir los factores de riesgo generales como la hipertensión, las enfermedades cardíacas, la obesidad y un estilo de vida sedentario.
En esta etapa de la pandemia, muchas personas han tenido COVID y las consecuencias a largo plazo aún están emergiendo. Es importante continuar monitoreando el impacto de esta enfermedad en la discapacidad futura. Así es como los nuevos hallazgos de especialistas requieren investigación para comprender los mecanismos subyacentes y para la vigilancia continua de los impactos a largo plazo de COVID-19 en la enfermedad de Alzheimer.