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Reestructuraron la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación

El gobierno oficializó la reestructuración de la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación. La reforma apunta a eliminar la burocracia y optimizar recursos, con un renovado comité directivo y nuevos mecanismos de evaluación y ejecución de fondos.

El Decreto 447/2025 redefine el lugar institucional de la Agencia, pasando de una órbita ministerial a depender de la Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología, tras haber sido creada antes de que el Ministerio se redujera a Secretaría.

También se estableció que la dirección pasará a manos de un Comité Directivo compuesto por un presidente con rango de secretario y dos directores “ad honorem”. Ambos directores deberán representar distintas disciplinas y sectores, y conformar un espacio deliberativo para tomar decisiones sobre programas de financiamiento e incentivos.

Además, esta reforma busca eliminar ocho cargos del directorio actual, con el objetivo de acelerar la gestión, reducir gastos en viáticos y comisiones, y hacer más transparente y equilibrada la estructura estatal.

Por otro lado, se redefinieron las funciones de la Agencia para que incluya la administración, diseño, ejecución y evaluación de programas con criterios claros como factibilidad económica, nivel de riesgo y recupero financiero de los fondos reembolsables.

Sin embargo, en los últimos meses renunciaron en masa los vocales del directorio en rechazo a lo que denunciaron como desfinanciación, desvinculación de programas clave, parálisis institucional y retención de más de 50 millones de dólares de fondos, generando impacto en miles de proyectos y científicos.

De hecho, voceros de la comunidad científica afirmaron que “la situación es una catástrofe” y advirtieron que los recortes golpean temas como ciencias sociales, medio ambiente y cambio climático, al centralizar la política científica en sectores como agroindustria, minería y economía del conocimiento.

Fuente: Infobae

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