Salvador Mazza: Cruce de denuncias por una gresca entre el intendente y un empresario
El intendente Gustavo Subelza denunció un ataque del empresario Pablo Ojeda. Este último respondió la acusación e informó que solicitó la intervención del municipio ante el Concejo Deliberante.
La pelea sucedió el 30 de diciembre a la noche y ambas partes hicieron denuncias ante la justicia por el tema. El medio local FM Solidaridad entrevistó a los implicados quienes dieron su versión de los hechos.
Según señalaron fuentes de la zona a Nuevo Diario, el motivo del conflicto tiene que ver con una disputa del municipio con el privado por el cobro de impuestos por el despacho de granos hacia Bolivia, actividad comercial frecuente en la frontera.
Subelza, intendente de Salvador Mazza, afirmó en una entrevista que Ojeda junto a otros dos individuos lo increparon a golpe de puño cuando buscaba a su hijo de la casa de su suegra.
“Fui a buscar a mi hijo ahí a la casa de mi suegra. Y fui increpado con un auto blanco, donde bajaron tres personas y empezaron a golpearme”, aseguró Subelza.
El jefe comunal confirmó que radicó la denuncia por el hecho donde anexó capturas de pantalla y fotografías donde habrían supuestas amenazas de Ojeda en su contra y de su familia.
Además, afirmó que es hostigado por el empresario mediante llamadas y mensajes de texto en tono amenazante.
Por su parte Ojeda respondió a las acusaciones y manifestó que Subelza mintió en sus declaraciones, sosteniendo que solo actuó en defensa propia.
“No fue una patota. Que sea hombrecito y que diga que fue mano a mano. El se bajó de la camioneta, porque fue con su camioneta y no fue con su hijo, con una violencia y el bajó a matarme. Me pegó dos piñas, no me volteó, me dejó de pie y ahí actué yo. Que diga la verdad, que no sea tan mentiroso y que sea más hombre, porque esa es la verdad“, sostuvo Ojeda en su relato de los hechos.
El empresario reconoció con dos masculinos al careo con el jefe comunal, pero indicó que “los llevó para asegurar que nadie se meta“, asegurando que Subelza también fue en compañía de dos hombres.
Tras los eventos, Ojeda afirmó que presentó ante el Concejo Deliberante de Salvador Mazza un pedido de intervención del municipio alegando inhabilidad moral por parte del intendente. Sin embargo, el cuerpo de concejales podrá tratar este pedido recién en febrero, con el regreso de las sesiones ordinarias.
Por su parte, Subelza manifestó que viajó a Salta para presentarse ante el Procurador General de la Provinicia y solicitar su intervención ante los hechos.
El conflicto por los despachantes de Aduana
El hecho generó conmoción en la localidad fronteriza, dado que es el punto de ebullición de un conflicto con trasfondo político.
Fuentes de la zona explicaron a este medio que el conflicto entre Ojeda y Subelza se debe a la intervención que el municipio busca realizar sobre la estación ferroviaria de Salvador Mazza, lugar donde se despachan granos que llegan desde el sur con destino a Bolivia a través del ferrocarril.
Ojeda es un empresario del sector y despachante de aduana que se dedica justamente al rubro del comercio exterior de granos, cuestionado por parte del pueblo.
Actualmente la estación ferroviaria sirve como un punto de carga del ferrocarril con destino a Bolivia. Al lugar llegan camiones de gran tonelaje con granos como soja o maíz. En el lugar, los granos se cargan dentro del tren para transportarse hacía Bolivia.
El reclamo de los vecinos se debe a la contaminación que generan el sobrante de granos que no alcanzan a ser transportados y ante las altas temperaturas fermentan; ocasionando malos olores que cubren casi toda la localidad.
Subelza reclama que este sector debe tributar a la comuna, más aún por el perjuicio que genera la actividad. Por su parte, Ojeda sostiene que la Municipalidad no tiene la facultad de imponerle impuestos, sosteniendo que no es de su jurisdicción.
Ante esto, el jefe comunal confirmó que va a clausurar la estación ferroviaria.
Siguiendo con la polémica, el empresario agregó entre sus acusaciones que le prestó a Subelza alrededor de U$S 800.000 dólares para la campaña electoral del 2.023; sosteniendo que el intendente no puede explicar de donde sacó el dinero para devolver ese monto al empresario.
Según se informó a este medio, el fiscal penal Armando Cazón inició una causa para investigar el conflicto, aunque no se conocieron imputaciones ni medidas sobre el caso.