Se registra una caída de los casos de Salmonella en Salta
El Ministerio de Salud Pública informó que se registró una notable disminución en los casos de salmonelosis en Salta, en las últimas 9 semanas epidemiológicas.
Tras un brote de esta enfermedad, que inició el 26 de noviembre del 2023 y se extendió hasta el 27 de enero del 2024, en el que se notificaron 920 casos positivos y la provincia se encontró en zona de alerta según el corredor endémico de salmonella, hoy disminuyeron.
A partir del 28 de enero, los números han mostrado una tendencia a la baja en cada semana epidemiológica, alcanzando hoy niveles considerablemente bajos.
Según el índice epidémico, que se entiende como la razón entre los casos presentados en la semana correspondiente y los casos que se esperan o prevén para la misma semana, actualmente Salta se encuentra con una incidencia baja de casos, lo que significa que hay menos positivos de los esperados.
El director general de Coordinación Epidemiológica, Francisco García, explicó que “los datos recopilados, cada cuatro SE, indican que la incidencia actual de la salmonelosis es baja y que los casos notificados son menores a lo esperado, en comparación con las estadísticas de años anteriores para el periodo estival. Este descenso significativo en la prevalencia de la enfermedad es motivo de optimismo para la salud pública de nuestra provincia”.
Agregó que, hasta la SE 15, “se notificaron 374 positivos, de los cuales 304 se han registrado en las primeras cuatro SE del 2024 cuando estábamos en la zona de alerta, lo que representa el 81,3% del total de casos”.
En comparación con el 2023, en las primeras 15 SE de ese año, se registraron 492 positivos, mientras que en 2024 fueron 374. La diferencia es de 118 pacientes, en igual periodo, entre un año y el otro.
El funcionario destacó que en enero se logró bajar el pico de casos y que antes se alcanzaba a inicios de marzo. “La disminución está relacionada con las acciones que se realizaron en diciembre del 2023, sobre el río Arenales y en el control de algunas fincas de la zona que utilizaban agua sin tratamiento, que estaba contaminada con materia fecal, para el riego de cultivos”.