Sigue la polémica: Djokovic apeló y espera en Melbourne
Australia no expulsará de forma inmediata al número uno del tenis mundial Novak Djokovic, indicó un abogado del gobierno durante una audiencia judicial este jueves, mientras el tenista permanece retenido en un centro de inmigración.
Después de que el serbio apelara su expulsión del país, el abogado del Estado Christopher Tran aseguró que Australia no prevé proceder a dicha expulsión antes de que se celebre esa audiencia, prevista para el lunes.
El número uno del tenis mundial, Novak Djokovic, apeló este jueves su deportación de Australia luego de que las autoridades fronterizas revocaran su visa por no presentar los requisitos de vacunación para ingresar al país.
El serbio quedó a disposición de la patrulla fronteriza australiana tras llegar la noche del miércoles, y permanece retenido en una instalación migratoria de Melbourne.
Djokovic llegó a participar en el Open de Australia, primer torneo Gran Slam del año, pero no aportó evidencia de tener la vacunación completa al aterrizar, dijo el primer ministro conservador, Scott Morrison.
"Las reglas son las reglas, especialmente cuando se trata de nuestras fronteras (…) Nadie está por encima de las reglas", aseguró Morrison en conferencia de prensa.
Las autoridades fronterizas australianas cancelaron el visado de entrada de Novak Djokovic, horas después de que el número 1 mundial quedase retenido a su llegada a Melbourne, un hecho que fue considerado como "maltrato" por parte del presidente serbio.
De ser finalmente deportado, el tenista serbio se quedaría sin la posibilidad de jugar, a partir del 17 de enero, el Open de Australia, donde buscaba su 10º título y batir el récord de 20 Grand Slams que ahora comparte con Roger Federer y Rafael Nadal.
Australianos indignados
La decisión de autorizar la entrada de Djokovic había provocado indignación en Australia, cuyos residentes han estado sometidos a importantes restricciones, confinamientos y cierres fronterizos durante gran parte de los últimos dos años.
Djokovic expresó su oposición a la vacuna contra el coronavirus en abril de 2020, cuando se planteó que podría ser obligatoria para reanudar los torneos.
"Personalmente no soy provacuna", declaró entonces Djokovic. "No quisiera que alguien me obligue a estar vacunado para poder viajar".