Taiwán suma nuevos drones Altius‑600M estadounidense en su estrategia de defensa

El Ministerio de Defensa confirmó la incorporación de drones Altius‑600M fabricados en EE. UU. por Anduril. Operarán en reconocimiento y ataque, reforzando el disuasivo frente a China.
Taiwán recibió el primer envío de drones de combate Altius‑600M, construidos por la empresa estadounidense Anduril, según informó su Ministerio de Defensa . Aunque no se reveló el número exacto de unidades entregadas, la entrega representa un avance significativo en su plan de fortalecimiento militar.
El ministro Wellington Koo recibió al fundador de Anduril, Palmer Luckey, en Taipéi. Durante el encuentro destacó que los Altius‑600M aportarán “capacidad de combate inmediata” y serán clave para implementar defensas en profundidad y ataques terrestres.
Estos sistemas no solo sirven para reconocimiento y transmisión de datos, sino que son esenciales en operaciones asimétricas, explicó Koo. Subrayó que la estrategia se centra en adaptarse a un entorno de amenazas crecientes mediante tecnologías emergentes.
La entrega forma parte de un paquete aprobado por EE. UU. en junio de 2024, que incluye en total 291 drones Altius‑600M y 720 misiles merodeadores Switchblade 300, por un valor estimado en 360 millones de dólares. Equipos similares ya fueron enviados a Ucrania, donde su empleo ha servido como referencia para Taipéi.
El incremento de maniobras militares chinas en el estrecho de Taiwán ha elevado la urgencia de reforzar la defensa nacional. En este contexto, los drones aportan rapidez, flexibilidad y precisión, y representan un pilar de la nueva doctrina tecnológica de la isla.
Aunque no se ha detallado cuándo estarán operativos ni el cronograma exacto de envíos, la presencia de Luckey durante la entrega sugiere un avance en los tiempos estimados Según el Ministerio, se planifica continuar incorporando drones tanto de reconocimiento como de ataque.
Taipéi apuesta así por conformar una flota robusta de vehículos no tripulados capaces de dar respuesta pronta ante agresiones. La cooperación con Estados Unidos no solo refuerza la capacidad tecnológica local, sino que refuerza su posición estratégica en una región clave.
El enfoque de defensa de Taiwán se fundamenta en tácticas asimétricas. La prioridad ahora es acelerar la modernización militar, incorporando inteligencia artificial, sensores avanzados y misiles de precisión. Los Altius‑600M son vistos como la punta de lanza de un sistema más amplio.
El Gobierno mantiene que seguirá evaluando sus opciones y adquiriendo equipos adecuados. Mientras tanto, el régimen chino continúa sus ejercicios cerca de la isla, lo que impulsa a Taipéi a apurar su plan de equipamiento y preparación ante posibles escenarios de confrontación.
La llegada de estos drones Altius‑600M marca un cambio estratégico. Desde su rol en Ucrania hasta su despliegue en Taiwán, estos modelos han demostrado potencial en contextos de conflicto moderno. La isla ahora se posiciona con mayor capacidad operativa en un entorno dinámico y volátil.
Fuente: Infobae