Ucrania denuncia la decapitación de un prisionero por soldados rusos
Un nuevo vídeo de atrocidades difundido en las redes sociales muestra a un soldado ucraniano decapitado, al parecer por mercenarios rusos del grupo Wagner.
Esta semana, "apareció un vídeo de cómo los ocupantes rusos muestran su naturaleza bestial: torturan severamente a un prisionero ucraniano y le cortan la cabeza con un cuchillo", declaró este miércoles Vasili Maliuk, director del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU). Según sus palabras, "se ha iniciado una investigación (…) a los autores los encontraremos y serán castigados".
El presidente del país, Volodímir Zelenski, por su parte, ha llamado a la comunidad internacional a "reaccionar" ante tales crímenes.
"Hay algo que el mundo no puede ignorar: lo fácil que matan estas bestias", manifestó Zelenski a través de su canal de Telegram. A su juicio, "todo el mundo debe reaccionar, todos los líderes", asegurando además que "no esperéis que esto se olvide, no serán olvidados los asesinos, que tendrán que hacer frente a sus responsabilidades legales por cada crimen». El líder ucraniano termina subrayando que «derrotar al terror es necesario".
El ministro de Exteriores ucraniano, Dimitro Kuleba, denunció que "Rusia es peor que el Estado Islámico" y que es absurdo que este mes pueda estar presidiendo el Consejo de Seguridad de la ONU.
Naciones Unidas, precisamente, ha reaccionado «horrorizada» al contenido del vídeo. "Muestra una ejecución brutal de un hombre que parece ser un prisionero de guerra ucraniano", se señala en un comunicado de la ONU.
También el Kremlin considera horrible la filmación, aunque subraya que hará falta comprobar su autenticidad. "Por supuesto, son imágenes horribles", declaró hoy a los periodistas el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov. Pero añadió que "en el mundo de bulos en el que vivimos, la autenticidad de este video debe ser verificada".
No es la primera vez
Otro vídeo con decapitaciones, aparentemente perpetradas el pasado verano, apareció ya antes en las redes sociales rusas situándolo en las inmediaciones de Bajmut.
Las imágenes más recientes muestran a un militar con cintas blancas, como las que llevan las fuerzas rusas, cortando la cabeza con un cuchillo a un soldado con los distintivos ucranianos. Los gritos al comienzo del vídeo sugieren que la víctima estaba viva en el momento de la decapitación.
El primero en reaccionar fue el jefe de la Administración presidencial ucraniana, Andri Yermak, quien advirtió que "habrá respuesta y responsabilidades para los asesinos".
Su secretaria de comunicación, Daria Zarivna, dijo que el objetivo principal de tan salvajes ejecuciones consiste en intimidar, no sólo a Ucrania, sino también a las sociedades occidentales.
El Instituto para el Estudio de la Guerra de EE.UU. (ISW) señalaba el lunes al grupo Wagner como autor de las decapitaciones.
En el verano de 2022, también se publicaron vídeos de soldados rusos castrando a un militar ucraniano y, el mes pasado, otro vídeo mostraba el fusilamiento sumarísimo de Oleksandr Matsievski, francotirador de élite ucraniano, por decir «¡Gloria a Ucrania!».
El Defensor del Pueblo de Ucrania, Dimitri Lubínets, afirmó entonces que la ejecución de un prisionero de guerra es una violación de la Convención de Ginebra. Ha habido otros casos de atrocidades y en los dos bandos.
En noviembre, aparecieron imágenes de la ejecución de tres soldados rusos en la región de Lugansk. El Ministerio de Defensa ruso lo calificó de masacre sangrienta. Las autoridades ucranianas prometieron investigar el incidente.