Ucrania reporta 57 muertos y 169 heridos en el primer día de invasión rusa
El ministro de Sanidad ucraniano, Oleh Lyashko, dijo que 57 personas murieron y 169 resultaron heridas después de que Rusia lanzara una invasión a gran escala en Ucrania. Además cerca de 100.000 personas huyeron de sus hogares en Ucrania y miles buscaron refugio en el extranjero tras la invasión indicó la ONU.
“Pensamos que cerca de 100.000 personas huyeron ya de sus hogares y podrían haberse desplazado en el interior del país y que varios miles cruzaron las fronteras internacionales”, declaró a la AFP un portavoz del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (Acnur), Shabia Mantoo.
El Gobierno ucraniano ha instado a la población a donar sangre y a buscar atención médica fuera de los hospitales si su estado de salud se lo permite.
Rusia por su parte no ha informado aún de las bajas sufridas.
El Kremlin lanzó hoy una “operación militar especial” en Ucrania desde todos los flancos, el este, el norte y el sur, y ya se acerca a la capital, Kiev.
Las Fuerzas Armadas de Rusia emplearon armas de alta precisión contra infraestructuras militares, baterías antiaéreas y bases aéreas militares, y aunque el Ministerio de Defensa aseguró que no atacan ciudades ni civiles, al menos cuatro ciudadanos murieron hoy en un ataque perpetrado por la artillería de las milicias separatistas prorrusas contra un hospital en la región de Donetsk, según las autoridades locales.
Las tropas rusas se apoderaron de una base aérea estratégica cerca de Kiev, así como de la zona de la central de Chernóbil, contaminada aún por la radiactividad del accidente nuclear de 1986, cuando Ucrania era parte de la hoy desmembrada Unión Soviética.
La base aérea de Gostomel cayó tras un ataque llevado a cabo por soldados llegados en helicóptero desde Bielorrusia, un país aliado de Rusia, reportaron testigos.
“Los helicópteros llegaron y empezaron los combates. Disparaban con ametralladoras y lanzagranadas”, indicó uno de los testigos, Serguiy Storojouk.
Ese aeródromo podría servir de puesto de avanzada para lanzar una ofensiva sobre Kiev.
Un miembro de un servicio occidental de inteligencia estimó que Rusia tiene ahora una “completa superioridad aérea”, ya que el gobierno de Kiev no posee más recursos contra este tipo de ofensiva.
Intervenciones militares rusas desde la desaparición de la URSS
Desde la disolución de la Unión Soviética en 1991 Rusia ha intervenido militarmente en varios conflictos, todos salvo el caso de Siria en el territorio de países que formaban parte de la antigua URSS, como sucede en la ofensiva que lanzó durante la pasada madrugada sobre Ucrania.
Georgia
Tras la desintegración de la URSS y la declaración de Georgia como república independiente, dos regiones situadas en su territorio, Osetia del Sur y Abjasia, rechazaron integrarse en ella y proclamaron su autonomía, que no fue aceptada por Georgia.
La creciente tensión desembocó en sendos conflictos armados: el de Osetia del Sur se desarrolló entre 1990 y 1991 y se saldó con 2 mil muertos y el de Abjasia, entre 1992 y 1993, costó más de 10.000 vidas y el éxodo de 300 mil georgianos que vivían en la región. En ambos casos los separatistas contaron con el apoyo de Rusia.
En agosto de 2008 tropas georgianas atacaron Tsjinval, capital de Osetia del Sur, y otras localidades, lo que desencadenó la intervención de fuerzas militares rusas en apoyo de las milicias surosetas y obligó a retirarse a los georgianos. El conflicto se prolongó durante cinco días y causó más de 600 muertos. Dos semanas después Rusia reconoció la independencia de los dos territorios.
Chechenia
Rusia ha intervenido en las dos sangrientas guerras secesionistas que ha sufrido esta república del Cáucaso ruso, y que ha dejado decenas de miles de muertos.
Las hostilidades comenzaron en 1994 cuando Moscú irrumpió en este territorio que había proclamado su independencia en 1991, apenas un mes antes de que el último líder soviético, Mijaíl Gorbachov, firmara la defunción de la URSS.
La intervención finalizó en 1996 con la retirada del Ejército ruso, el desarme de la guerrilla y la posibilidad de iniciar un proceso de autodeterminación, que se frustró en 1999 con la llegada de Vladimir Putin al poder y una cadena de atentados en Rusia y en la vecina república rusa de Daguestán, que Moscú atribuyó a terroristas chechenos.
En febrero de 2000 Rusia se apoderó de Grozni, mientras continuaron las hostilidades que el Kremlin dio por oficialmente finalizadas en 2009.
Kirguizistán
El Gobierno de provisional de Kirguizistán pidió a Rusia en 2012 el envío de fuerzas de paz para controlar la situación en la ciudad kirguís de Osh, donde se habían producido choques armados entre kirguises y uzbekos que se habían saldado con decenas de muertos y cientos de heridos.
Las tropas rusas se han mantenido en Kirguizistán desde entonces y Rusia es el principal aliado de la república centroasiática desde que las autoridades de ese país ordenaran el cierre en 2013 de la base aérea estadounidense situada en el aeropuerto internacional de Manás. En 2017 los dos países acordaron prolongar la presencia rusa otros 15 años.
Ucrania
Además del conflicto en el Donbás, en marzo de 2014 Rusia se anexionó la península de Crimea, que había formado parte de la antigua república soviética de Ucrania y se mantuvo bajo domino ucraniano cuando este país se constituyó como república independiente.
El 22 de febrero de 2014 y después de tres meses de protestas fue derrocado el presidente de Ucrania, Viktor Yanukovich, que se refugió en Rusia. Grupos armados prorrusos tomaron entonces las sedes del Gobierno y la Rada crimeos.
La anexión de Rusia se produjo después de un referéndum en la península no reconocido por Ucrania ni la comunidad internacional que se celebró en marzo de ese año en medio de una intervención militar rusa incruenta.