Un Papa que trabajó contra la contaminación y por la unidad

Durante la misa de ayer, oficiada por el arzobispo de Salta, Mario Antonio Cargnello, agradeció la presencia de autoridades provinciales y municipales en este momento que vive la iglesia católica.
En la homilía destacó el trabajo de Francisco al asumir la proyección ecológica en la Encíclica Laudato Sí, que “fue una de las más leídas en la historia de la iglesia y que arraigó fuera del catolicismo, y cinco años después recién se la comenzó a leer”.
Destacó que Francisco vio que la agresión a la creación afecta a los más pobres: “en las periferias, donde viven los más humildes, se tiran la basura y se contaminan las aguas”.
Sobre su devoción a la virgen María, Cargnello manifestó: “soy un cristiano que quiso estar para todos -dijo el papa-, todo impregnado por la fuerza que le pedía a la Virgen. Su fe en el señor Jesús, que hace mirar hacia adentro, y él se identificó con los necesitados”, dijo el obispo de Salta.
La dimensión misionera no sólo se extiende en la universalidad, sino en la profundidad del espíritu para servir a Cristo, “en la carne para servirlo con los necesitados, donde el pobre nos muestra las llagas de Cristo”.
Finalmente, el arzobispo dijo que, en los últimos días, Francisco fue a Santa María La Mayor donde también era de ir por Ignacio de Loyola, que es donde estará sepultado, sin grandes adornos, y pidió que figure como Obispo de Roma.
Buscó la unidad de los cristianos siempre y este año se dio la Pascua junto a otras religiones.
Padre M. Sánchez: “La historia lo mostrará en plenitud”
Los sacerdotes en Salta también fueron mostrando su estado de ánimo ante el fallecimiento de Francisco, o Jorge Bergoglio como muchos de ellos llegaron a conocerlo.
En este sentido, Nuevo Diario conversó con Marcos Sánchez, vicario para el clero, quien dijo: “me sorprendió mucho su muerte. A pesar de saber que estaba muy enfermo, no pensé que sería tan pronto”, dijo y agregó: “Cuando era cardenal, sabemos que se daba con todos, yo no lo conocí personalmente, pero hay muchas anécdotas”.
Como papa dejó muchos gestos, siempre buscando la paz -destacó Sánchez-, “era un hombre conservador en lo dogmático, pero guardando el depósito de la fe, haciendo una iglesia abierta, me queda esta frase: ‘quién soy yo para juzgar, Dios perdona siempre’. Sus frases han llegado mucho más por su lenguaje sencillo”.
También dijo que le sorprendió su producción en las encíclicas, y recordó Evangelii Gaudium, primera exhortación apostólica escrita por el papa Francisco, que fue muy fuerte ya que “en esa obra de arte hace un recorrido sobre los testimonios de los Santos, hablando de los afectos y del amor de Jesús, de Francisco, y de cómo Jesús es signo de contradicciones”.
“Hoy se pueden ver en las redes mucha gente que lamenta su partida y otros que no”, señaló.
Por último, compartía con el papa ser hincha de San Lorenzo, “la historia mostrará el gran papa, no solo por ser argentino, sino por su obra”.