Un testimonio agravó la situación de la exintendente de Isla de Cañas
Durante la cuarta jornada del juicio que se sigue contra Angelina Lucia Canchi (56), exintendenta de la localidad de Isla de Cañas, declaró el denunciante.
La mujer acusada de los delitos de usurpación por continuación arbitraria en el ejercicio del cargo, fraude en perjuicio de la administración pública por administración fraudulenta y por supresión de documentos, peculados reiterados (cuatro hechos) todos en concurso real.
La ronda de testimoniales inició con el relato del denunciante, Jorge Canchi. Contó que cuando asumió sus funciones como intendente de la localidad de Islas de Cañas, el 10 de diciembre de 2.019, estaba únicamente el secretario de gobierno de la exintendenta, Saturnino Zambrano. Agregó que en ese momento no se le hizo entrega de ninguna documentación, no había chequera, y tampoco fondos municipales. Agregó que se fue enterando por los empleados que no se le había pagado el sueldo de noviembre, en una nómina de sesenta y ocho trabajadores. Dijo que les pidió que le hicieran una nota, y que para poder afrontar ese pago tuvo que pedir un préstamo. El 13 de diciembre de ese año empezó a hacer averiguaciones en el Banco Macro y le dijeron que no había plata en la cuenta.
Cheques sin cobrar y falta de pago de sueldos
Jorge Canchi declaró que empezaron a aparecer varios cheques que habían sido librados en diciembre, firmados por la exintendenta y no pudieron cobrarse. Agregó que meses después tuvo que cancelar esa deuda por un monto de un millón y medio de pesos.
Refirió que antes de asumir no pudo reunirse con su antecesora ya que ella entró de licencia médica hasta que él se hizo cargo. Dijo que él fue empleado municipal y sabía que los sueldos eran bancarizados, que las horas extras no se pagaban con cheque sino a través de órdenes de pago en efectivo. Agregó que esas documentaciones tampoco estaban en la Municipalidad. Al advertir todo esto con su nuevo equipo hizo el relevamiento de los bienes de la comuna.
También se refirió a la Cooperativa de la Fábrica de Dulces, que nunca funcionó. Contó que los bienes habían desaparecido en su totalidad, y que las instalaciones estaban acondicionadas con camas desde la pandemia, y así continúa hasta la actualidad.
También declaró un empleado municipal y la expresidenta de la Cooperativa de la fábrica de Dulces.
El juicio está a cargo de Aldo Primucci, vocal de la Sala I del Tribunal de Juicio. Por el Ministerio Público interviene la fiscal penal interina de Delitos Económicos Complejos de Orán Mariana Torres. La defensa de la acusada está a cargo de Lucinda María Segovia y Enzo Saldía.
Los hechos juzgados ocurrieron cuando Canchi se desempeñaba como intendenta en la Municipalidad de Isla de Cañas, departamento Iruya.