Deporte

Zeballos y su gran sueño de festejar en Wimbledon

El argentino Horacio Zeballos disputará la final de dobles de Wimbledon por segunda vez en su carrera en compañía del español Marcel Granollers: enfrentarán al neerlandés Wesley Koolhof y al local Neal Skupski (no antes de las 10.30) con televisación de ESPN.

El sueño máximo para el argentino es el de ganar su primera corona de Grand Slam tras haber perdido dos finales en el pasado: US Open 2019 (cayeron ante los colombianos Juan Sebastián Cabal y Robert Farah) y Wimbledon 2021 (perdieron con los croatas Nikola Mektic y Mate Pavic).

Su nombre ya está grabado a fuego en la historia del tenis argentino, porque es uno de los pocos que pudo alcanzar una definición sobre el siempre esquivo césped. El recuerdo más destacado es de 1988, cuando Gabriela Sabatini alzó la corona en el dobles junto con la alemana Steffi Graf tras vencer a la dupla de la Unión Soviética compuesta por Larisa Savchenkoy Natasha Zvereva.

Las otras veces que la bandera argentina flameó en lo más alto del All England Lawn Tennis y Croquet Club de Londres entre todas las especialidades fue por Gustavo Fernández en tenis adaptado (campeón dobles 2015 y 2022 y singles 2019), María Salerni (campeón junior en singles 2000 y en dobles 1999), Gisela Dulko (campeón junior de dobles en 2001), Axel Geller (campeón en dobles de junior 2017), Guillermo Coria y David Nalbandian (campeones juntos en dobles de junior en 1999).

Argentina tuvo a dos tenistas en lo más alto del ranking de dobles de la mano de Paola Suárez (2002) y Gisela Dulko (2010).

Djokovic, a la final

El serbio Novak Djokovic, número dos del ranking ATP, nunca deja de sorprender. Con 36 años y una carrera colmada de títulos,  aspira a más. Derrotó a Jannik Sinner (8º) por 6-3, 6-4 y 7-6 (4) en Wimbledon y accedió a una nueva final de Grand Slam: la 35º de su trayectoria y la novena en Londres.

Además, quedó a un solo partido de igualar la marca de ocho trofeos de Roger Federer en La Catedral del tenis y de recuperar el número uno del mundo.

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