Renuevan la protesta por desmonte en el norte de Salta
Activistas ambientales desplegaron ayer en Salta un nuevo cartel gigante en medio de una finca de casi 12.000 hectáreas, ubicada a unos 20 kilómetros de la localidad de Dragones, en el norte de esta provincia.
Según se informó, esta propiedad pertenece al empresario agropecuario Juan José Karlen, que ya fue denunciado por Greenpeace Salta mediante el informe "El festival de los desmontes no se detiene" en 2013 y 2016.
De la protesta con el despliegue de la bandera participaron 33 activistas de varias provincias, quienes desplegaron dentro de la finca un cartel con un signo de pregunta gigante y la frase "¿Y el bosque?" y otros dos carteles en forma de cinta métrica para delimitar la superficie de una hectárea (100 metros x 100 metros), como una pequeña muestra de las 11.875 que allí se deforestaron ilegalmente.
El tamaño de este desmonte ilegal equivale a media ciudad de Buenos Aires.
Con esta nueva protesta, activistas de la organización ecologista Greenpeace vuelven a denunciar que "su dueño lleva impunemente 10 años sin restaurar el bosque y con producción agropecuaria", afirman desde la organización.
Asimismo invitan a la ciudadanía a votar una consulta popular sobre "si hay que penalizar desmontes ilegales e incendios forestales". Para este fin se habilitó la web: votaporlosbosques.org, donde se puede participar de la consulta. Los resultados serán entregados al Congreso de la Nación.
Desde la organización se asegura que este flagelo de la deforestación no se soluciona con multas.
“Es evidente que las multas no son suficientes para desalentar la deforestación ilegal, y los empresarios suelen incluirlas como un costo más de producción. La gente votará si considera que se debe penalizar su destrucción
“Debe ser un delito penal”
“El desmonte ilegal debe ser un delito penal”, afirmó a Nuevo Diario, Noemí Cruz, coordinadora de la campaña de Bosques de Greenpeace.
"Se trata del desmonte ilegal más grande del país de las últimas décadas. Un ecocidio que realizaron durante varios meses con 18 topadoras, y la AFIP los denunció por trabajo esclavo", añadió.
Hace una década, luego de la denuncia, les aplicaron una multa por el desmonte, "pero terminaron acordando un plan de remediación del bosque que nunca se concretó, y siguen con su negocio agropecuario como si nada. Este es un claro ejemplo de la impunidad con la que se viola la Ley de Bosques", enfatizó Cruz.
"Los bosques son fundamentales para la regulación climática e hídrica, y contienen la mayor cantidad de especies del planeta. Nos brindan recursos claves como alimentos, medicinas y maderas, y son el sustento y territorio de comunidades indígenas y campesinas, concluyó Cruz.