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Escándalo por uso de vehículo presidencial vinculado a prófugo

Escándalo por uso de vehículo presidencial vinculado a prófugo y la presidenta Boluarte niega nexos con Vladímir Cerrón.

Un nuevo escándalo político envuelve a la presidencia de Perú. El vehículo oficial asignado a la presidenta Dina Boluarte, conocido como “el cofre”, ha sido vinculado al prófugo médico neurocirujano y exgobernador de Junín, Vladímir Cerrón. La controversia se desató luego de que se confirmara la presencia del automóvil en el sur de Lima el fin de semana del 24 y 25 de febrero de 2023, sin que la agenda pública de la mandataria registrara actividades oficiales en esa zona.

El vehículo, un Lexus con placa EGR-844 registrado a nombre del despacho presidencial, fue captado por cámaras de seguridad de COVI Perú cruzando el peaje de Chilca el 24 de febrero a las 11:46 a.m. Sin embargo, el misterio sobre su propósito ha generado especulaciones, especialmente por su cercanía al condominio Mikonos, donde se presume que Cerrón pudo haberse escondido.

La primera reacción del Palacio de Gobierno, en marzo de 2023, fue que el automóvil estaba en “comisión de servicio”, sin brindar más detalles. No obstante, seis meses después, Fredy Hinojosa, vocero presidencial, cambió la versión, asegurando que el vehículo se utilizó para actividades familiares. Esta contradicción ha aumentado las sospechas en torno a la verdadera razón del viaje.

El suboficial técnico Jhon Janampa Ruiz, conocido como “la sombra” de la presidenta, también ha estado bajo escrutinio. Se confirmó que formó parte de la comitiva que acompañó al Lexus en su recorrido hacia el sur de Lima. Un reportero intentó obtener declaraciones de Janampa, pero este evadió las preguntas en el Palacio de Gobierno.

Boluarte desmiente las acusaciones

En un reciente pronunciamiento, la presidenta Boluarte negó rotundamente cualquier conexión con Vladímir Cerrón. Afirmó que las acusaciones sobre el uso del vehículo para ayudar en su fuga eran obra de “mentes siniestras”. La mandataria insistió en que el automóvil nunca abandonó Lima y desestimó las especulaciones.

A pesar de sus declaraciones, la controversia no se ha apagado. La información sobre el uso del automóvil ha sido clasificada como “reservada”, lo que ha generado aún más preguntas sobre su propósito real. Además, la cercanía temporal entre la presencia del vehículo y la búsqueda de Cerrón sigue siendo un punto de conflicto para la opinión pública.

Este incidente ha creado una ola de incertidumbre y críticas, sumando presión al gobierno de Boluarte. La falta de claridad sobre los hechos continúa alimentando el debate, y muchos piden una mayor transparencia sobre el uso de los recursos presidenciales.

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