Hasta $104.700 llegarán las multas por ruidos y la contaminación acústica
En la última sesión ordinaria, el Concejo Deliberante sancionaron por unanimidad el proyecto de ordenanza que prevé sanciones para la contaminación acústica y los ruidos molestos. Las multas según la gravedad llegan hasta los $104.700. La Municipalidad de Salta deberá definir el organismo de control.
El concejal autor del proyecto “Código de Protección Acústica”, Jose Gauffin, recalcó que su iniciativa busca “cuidar la salud de los vecinos y hacer un cambio cultural”.
La ordenanza prevé regular la emisión de ruidos y vibraciones, en tanto se trate de cualquier actividad que realicen los vecinos de Salta tanto del ámbito público como del privado, en concreto, “cualquier emisor acústico que origine contaminación por ruidos y vibraciones que afecten a la población o al ambiente”, según dicta el texto de la ordenanza.
La norma prevé sanciones que van desde las 150 unidades tributarias ($5235) hasta las 3000 unidades, que equivalen a un monto de $104.700.
Según detalla Gauffin en su proyecto, las actividades catalogadas como potencialmente contaminantes por ruidos y vibraciones deberán ser medidas por los inspectores. Entre estas actividades se encuentran principalmente los locales bailables que se encuentran dentro de la Ciudad de Salta.
Los vecinos podrán pedir que los inspectores municipales controlen las vibraciones que producen los locales en sus casas, pudiendo solicitar la infracción en el caso se incumpla la norma en cuanto a niveles.
La Municipalidad deberá establecer una escala de valores sobre la gravedad de las infracciones que deberá ser refrendado por el Concejo Deliberante, y el personal municipal se encuentra autorizado a empezar a generar actas de infracción una vez se promulgue la ordenanza.
La tarea del municipio
Por otro lado, el municipio tendrá 270 días para establecer los valores máximos permisibles de sonidos, basado en lo establecido por la ordenanza. El proyecto en paralelo estableció una regulación para los ruidos molestos de carácter transitorio y las distintas formas en que se ejecutara la aplicación de la ordenanza según los horarios.
En principio, las sanciones tendrán mayor gravedad cuando se trate de ruidos y vibraciones que afecten los horarios de descanso de las personas en días laborables.
Se prevé también en la redacción la conformación del mapa del ruido, mediante la implementación de un programa permanente de medición de los niveles de ruido en el ambiente exterior del espacio público.
Gauffin declaró que su intención no es “hacerle la guerra” a quienes se dedican a la organización de estos eventos, sino generar conciencia sobre la salud de los ciudadanos.