Renuncia del primer ministro serbio tras protestas masivas por corrupción
El primer ministro de Serbia, Milos Vucevic renuncia por el colapso de una estación de tren en Novi Sad que dejó 15 muertos. Esto derivó acusaciones de corrupción y demandas de responsabilidad política.
El primer ministro de Serbia, Milos Vucevic, ha presentado su dimisión en medio de intensas protestas que sacuden al país desde hace casi tres meses.
Estas manifestaciones, originadas por el colapso de una estación de tren en Novi Sad que dejó 15 muertos, han derivado en acusaciones de corrupción y demandas de responsabilidad política.
El 1 de noviembre de 2024, el techo de una estación de tren en Novi Sad se derrumbó, causando la muerte de 15 personas y dejando a otras 30 heridas.
Este trágico incidente desató una ola de indignación en todo el país, especialmente entre estudiantes y jóvenes, quienes lideraron las protestas exigiendo justicia y transparencia.
Declaraciones de Vucevic
En una conferencia de prensa, Vucevic afirmó que su renuncia busca reducir las tensiones en Serbia. “Es mi llamado a todos para que calmen las pasiones y vuelvan al diálogo”, precisó. Además, anunció que el alcalde de Novi Sad, Milan Djuric, también presentará su dimisión.
Las protestas no solo se centraron en el derrumbe de la estación, sino que también sacaron a la luz acusaciones de corrupción y críticas hacia el gobierno del presidente Aleksandar Vucic. Los manifestantes señalan al gobierno de Vucevic por presuntos actos de corrupción relacionados con fallos en la reforma de la estación ferroviaria.
Reacciones y próximos pasos**El presidente Vucic ha sido acusado de limitar las libertades democráticas, a pesar de buscar formalmente la membresía de la Unión Europea para la nación balcánica. Tras la renuncia de Vucevic, el Parlamento serbio tiene 30 días para ratificar la dimisión, formar un nuevo gobierno o convocar elecciones.
Las protestas continúan, con miles de personas bloqueando autopistas y enfrentamientos violentos. El movimiento estudiantil, respaldado por docentes y ciudadanos, exige responsabilidades políticas y una mayor transparencia en la gestión gubernamental.
En resumen, la renuncia del primer ministro serbio, Milos Vucevic, se produce en un contexto de creciente descontento social y demandas de reformas profundas en el país. La situación en Serbia sigue siendo tensa, y la comunidad internacional observa de cerca los acontecimientos.